Sunny days | Sasharcy

XXIV

Sasha se despertó en su cama vacía y con una ligera esencia en su cuerpo que supuso que era de Marcy. Ella la dejó dormir, y ahora, estaba agradecida de que la chica haya regresado a su apartamento temprano.

Se levantó e hizo su rutina usual: usó el baño, hizo la cama y se preparó un poco de café. Salió a su balcón, esperando que la Wu la saludara como siempre.

Pero Marcy no la saludó. Miró a su balcón, estaba vacío. No estaban las sillas y la mesa que usualmente tenía. La rubia llamó por su nombre, pero no hubo respuesta.

—Mierda, ¿con esto se refería al ya verás?—Se preguntó a sí misma mientras regresaba a su apartamento corriendo para salir al pasillo para tocar la puerta de Marcy.

—¿Puedo ayudarte?—Un hombre preguntó.

—Uh, sí. ¿Hay una chica llamada Marcy Wu aquí?

—No, no hay nadie llamada Marcy Wu viviendo aquí. Y si la hubo, ya se ha ido. Nosotros solo estamos limpiando este apartamento para que alguien más pueda vivir aquí—. El hombre respondió. Sasha estaba en shock.

—No, no puede ser. No hay forma.

—Lo siento, chica, pero así son las cosas.

—No. ¡Tú no lo entiendes!—Sasha agarró el cuello de la camisa del hombre y lo acercó—. ¿Sabes lo que eso significa?—El hombre sacudió su cabeza con miedo en los ojos. La de melena dorada soltó su agarre y apoyó su cabeza en la pared con lágrimas amenazando con salir de sus ojos. No estaba segura del por qué lloraba. No estaba segura de por qué estaba tan triste, después de todo, Marcy era la molesta vecina que quería fuera de su vida, y ahora que veía cómo su sueño se volvía real, se sentía horrible.

“Eso significa no más días soleados”.