—Como quieras llamarla no interesa, el punto es que puedes verme —espeta con un claro tono de ansiedad —Es decir, ¿estamos teniendo una conversación? No he tenido una en muchos años.

—¿Cómo puedes estar calmada si...? — AJ repentinamente nota algo sospechoso

—Oh, cierto, estamos rodeados de cucarachas —señala ante las criaturas —De verdad, son una abominación, qué clase de Chamán incompetente crearía Draugrs tan maltrechos, además el desperdicio de sangre es desagradable, un uso muy mediocre de sacrificios. ¿Sabes qué?, ya me decidí, voy a enseñarle a este amateur, lo que puede hacer una Bruja de verdad, solo necesito... —exclama mirando detenidamente a AJ— algo de sangre.

Tentáculos negros emergen de la tierra, atrapando a AJ y llevándolo frente a la Bruja.

Ella lo vio detenidamente a los ojos, su mirada era negra como la de un asesino que ya no encontraba ni el placer en matar; la mandíbula en su cuello se partió extendiendo una larga lengua frente al rostro de AJ.

La lengua sube lentamente por su rostro hasta su cabello, agarrando una liendre, acto seguido suelta a AJ lanzándolo fuertemente contra el suelo.

—Muchacho, ¿sabes acaso como un insecto puede matar a un gigante? —pregunta la bruja, mientras aplasta el insecto entre sus dedos, dejando caer una diminuta gota de sangre en su lengua —Simplemente no puede...

Repentinamente cayó el silencio, las criaturas a su alrededor que corrían y gritaban frenéticamente habían callado, mientras que sus auras se volvían más tenues.

AJ estaba sin palabras ante la monstruosidad que estaba vistiendo la piel de Olivia, conforme el rostro de la bruja se llenaba de una gran euforia.

—Ahora, ¿qué haré contigo...?

Desde las montañas, los Mercenarios veían confundidos lo que había pasado, mientras que Kane repentinamente empezó a sudar y respirar gradualmente con más fuerza hasta colapsar en el suelo de cansancio.

—¡¿Qué es esto?! —exclama arrodillado en el suelo.

—¿Qué pasa, Kane, tienes mal de altura? —pregunta Roxanne con una expresión burlona.

—¿Qué es esa cosa? —aclama con miedo que rápidamente se convierte en ira —¡¿Qué demonios es esa cosa que se está devorando mis creaciones?!

En el pueblo la niebla empieza a despejarse, mientras que las calles se muestran llenas de cuerpos amorfos cubiertos en vendajes, todos ellos apuntando hacia la bruja, que devoraba rápidamente sus auras.

Uno a uno los cuerpos empezaban a encogerse, hasta volverse cenizas, mientras que, en las montañas, el arquitecto de esta obra, empezaba a ser drenado junto con su trabajo.

Los brazos de Kane empezaron a cubrirse de un óxido negro, provocándole un gran dolor.

—Oye, Kane, ¿te estás muriendo? —pregunta, con una expresión arrogante en el rostro —Si te mueres, ¿me puedo ir a casa? Estoy aburrida.

—Maldita adicta, ¿qué no comprendes lo que nos pasará a los dos si regresamos sin el objetivo? —aclama agonizando en el suelo —¿Tienes alguna idea del terror que conlleva ir en contra de las ordenes de un Grimm?

—Qué lamentable eres Kane, temes a los Grimm y al concilio, eres débil y lamentable —afirma viéndolo con desdén, claramente ella no veía la situación con claridad.

—Qué hay de ti, si yo muero, la combinación de la caja con los fragmentos muere conmigo —señala sujetando el portafolios con los fragmentos —Encuentra a lo que está devorando a mis creaciones, y trae al objetivo con vida, hazlo y te diré la combinación.

Order Volumen 1 (Remake)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora