Yo soy Giulio Mancini

Capitulo 21

Giulio...

Dos semanas antes....

--Estas seguro de esto.-Pregunta Domenico aún sorprendido por mis palabras.

Una y otra vez observo las fotos en mis manos. Malditos bastardos.
Igor Tarásov lidera el grupo que tiene fichada a mi mujer.

Muy pronto sus ojos color avellana dejaran de ver. Por qué empezaré arrancandole los ojos por sólo el hecho de haber tomado una foto de mi esposa.

--Señor. La señorita Cristina está aquí.-Habla mi asistente.

--Hazla pasar y que no me interrumpan.

--Domenico solo sonríe bajando la cabeza a la vez que niega.

--Solo tú Giulio... Solo tú. - Sale mientras me palmotea el hombro.

Cristina entra con una enorme sonrisa en sus labios, moviendo más su cadera que de costumbre.

--Amore, sabia que ibas a recapacitar. Me dice mientras trata de acercarse y le sostengo las manos impidiendo su acercamiento.

--Pero.. - Trata de decirme pero la empujó al sillón de mi despacho en las bodegas Vinateras.

Me acerco y la sostengo del cuello impidiéndole el paso del aire. La ira se ve reflejada en mi rostro maldita traidora. La debí matar desde que invento mi supuesta paternidad. Maldita zorra.

--Sabias que es muy fácil descubrir con quien te revolcabas maldita zorra. Mi padre te revolcabas con mi padre en la cama donde dormía con mi madre y esperas a su bastardo. - Esta a punto de desmayarse cuando la suelto.

Tose de manera desesperada, mientras se sostiene el cuello que se le va poniendo morado debido a mi fuerza. Saco mi cuchillo y se lo paso por la mejilla mientras de ella bajan lágrimas que caen a sus muslos.

--Vas hacer exactamente lo que te diga sino quieres que te mate de forma lenta y turtuosa delante de tu padre. Que en este momento está follando a su asistente. Sino quieres que desvele a nivel internacional la clase de hombre que es tu papá y te mate por zorra harás exactamente lo que yo te diga.

Solamente asiente con su cabeza mientras la sostengo del brazo y la hecho fuera de mi despacho.

Maldita sea. Este plan debe de funcionar. La bratva está detrás de Sammy y necesito utilizar cualquier recurso para mantenerla a salvo aunque en el proceso quizá termine odiandome pero la mantendré a salvo cueste lo que cueste.

Debo mantener mi plan al pie de la letra. Así que comienzo de forma sutil alejándome de ella. Llegando tarde y no cenando con ella.

Necesito que piensen que Samantha no es importante para mí. Necesito que piensen que es como cualquier mujer florero en la vida de un mafioso o empresario. Así que me dejó fotografiar por los espías de la bratva con Cristina en las últimas semanas. Rento un apartamento donde pasó horas con la zorra mientras ella solo está en la sala yo estoy en el cuarto terminando mi trabajo y alistando mi golpe al ruso maldito que lidera la caza de mi esposa.

La noche llega y ceno con Sammy. Estoy sumamente estresado y descargo todo en la Rubia que termina en mis brazos. Mientras la alejo y le digo que necesito dormir o bien quiere un segundo round. Como todo un maldito cretino como me llama algunas veces.

-Por qué no quieres hablar conmigo Giulio. Hice algo malo?.-Pregunta mientras en sus ojos veo la duda que tiene.

Guardo silencio mientras veo dolor en sus ojos. Maldita sea creo que no podré hacer esto. No puedo hacerle esto.

--Mañana necesito vengas conmigo al casino subterráneo. - Le digo con mi voz de capo mientras se le desfigura el rostro ante el tono rudo de mi voz.

--Sabes ya me harte de sentirme como tu puta Giulio. Hace un mes me decías cuanto deseabas mi cercanía, mis caricias y ahora me siento usada. Que es lo que pasa.