-OMEGACEMBER- Jayce/Viktor

-púas en la lengua-

Viktor se miró su lengua por última vez en el espejo. Había varias cosas que lo hacían un omega imperfecto. Una de ellas era su olor tenue que lo hacía pasar por beta, su menor fuerza a comparación de otros omegas, sus celos poco frecuentes y la menos importante: la falta de púas en la lengua. Un vestigio de sus antepasados, que hoy en día no tiene mucho sentido. Alguna vez Jayce le llegó a comentar que esas cosas no le importaban, la falta de características en él no le importaban en absoluto.

No le había importado a él tampoco después de tantos años con su proclamado marido. Pero entonces se preguntó ¿Por qué había tomado ese proyecto de aquel alumno beta y lo había llevado a experimentación? Se sonrojó visiblemente, frustrado por un lado por lo bajo que estaban llegando estos nuevos alumnos y sus ideas para llenar un vacío de placer que no ayudaba a la evolución de su especie. Y otro por recordar que eso mismo lo había llevado a esa situación, el puro e inigualable placer.

Tal vez era porque su celo ahora se había regularizado desde que se había unido a Jayce y sus hormonas le dieron un vuelco a su mente y ahora era una nueva persona que desconocía, la que lo hacía comportarse... raro.

—¿Viktor, todo está bien ahí dentro?

—Diablos...—masculló, pues por la sorpresa había tirado la botella para revertir su rasposa lengua. —Todo está bien ahora salgo. —Contestó mientras limpiaba todo.

Cuando salió del baño, Jayce lo esperaba recargado en la pared, sin una camisa en su pecho, por sus pantalones y manchas en la piel, diría que acababa de llegar de la fragua Talis. Su mente solo pensaba en besarle ahí mismo y arrastrarlo al mueble más cercano para que le tomara. Hasta sentía incómodamente como un poco de lubricante salía de su ansiosa entrada al imaginarlo. Hasta pudo notar que su novio le estaba leyendo la mente, pues le dio una sonrisa pícara que le hizo temblar las piernas.

Pero una frase se colo entre esa fantasía "Notara las púas,  omega tonto". Frunció el ceño y cerró los ojos frustrado. Suspiro lo más tranquilo posible y miró a su marido con una sonrisa nerviosa.

—¿Día pesado? Estaba a punto de preparar algo para cenar, con el nuevo proyecto yo...

Viktor no pudo terminar la frase, pues Jayce se le acercó sigiloso como un animal acorralando a su presa.

—Justo me dio hambre, pero no exactamente de comida.

Su boca viajó a su cuello, muy cerca de la marca de unión, eso le hizo perder un poco de su control y olvidarse de aquellas púas que tanto buscaba ocultar. La boca de Jayce fue subiendo lenta y tortuosamente hasta su oreja, luego a su mejilla; parecía que comenzaba a flaquear, pues sus piernas se hicieron gelatina, Jayce lo tomo de la cintura para que no cayera, y apretó levemente, lo hizo jadear súbitamente.

Oh qué gran error.

Jayce aprovechó aquel jadeo para besarle y jugar con su lengua un momento. La sangre se le fue a los pies y sintió frío de repente. Jayce dejó de besarle y retiró su boca, pero aun lo sostenía de sus caderas.

—Algo está... raro aquí.— Le dijo mirándole a los ojos. —Tu lengua es...

—Te lo puedo explicar. ¡Hubo un incidente! y por error yo tomé algo y ahora tengo estas cosas...—Paró un momento mientras le mostraba la lengua con esas horrorosas púas.—Yo... ¿te gustan? digo, es lo que se supone debería tener ¿No? si pudiera ser un omega mas perfecto yo...

—Hey, Vitya, tranquilo, escucha. — Jayce le habló y miró con adoración.

Al final Viktor se dio cuenta que había comenzado a hiperventilar y sus ojos los comenzó a sentir mojados.

—No importa nada de eso, ¿Fue un accidente? los accidentes pasan, ¿Te gustan esas púas en tu lengua cariño?— Viktor negó con la cabeza.—Entonces te ayudaré a deshacerte de ellas. No hay nada, escúchame. No hay nada en el mundo que logre hacer que te vea imperfecto ante mis ojos. Debería agradecerle al universo que me eligieras para estar a tu lado. —Jayce le dio un corto beso.

Viktor sonrió y le regresó el casto beso a su esposo y toda la preocupación se esfumó.

*Imagen por aquarelacosmica