Un chico virgen [j.b] +16

Parte 5

Abrí mis ojos lentamente, sentía como si mis parpados y mi cuerpo pesaran toneladas; sin embargo, si siguiera durmiendo todo mi cuerpo se iba a entumecer y eso era lo menos que quería, me senté en la orilla de la cama esperando que la pesadez abandonara mi cuerpo, cuando me sentí lo suficiente capaz de mantener mi cuerpo de pie, me levante con una sábana cubriendo mi cuerpo, camine con pasó lenta a el baño de mi recamara para lavar mi rostro. Al sentir el agua fría con mi piel me sentí con mayor fuerza contra mí, salí a mi cuarto para buscar algo con que cubrirme para ir en busca de Justin, encontré una camisa que llegaba a la mitad de mis muslos -sí, tenía una obsesión con ellas-.

Bajé las escaleras de dos en dos, al llegar al final di un pequeño salto -soy demasiado infantil para mi edad- la sala estaba desierta, estaba a punto de subir de nuevo, cuando escuche un ruido provenir de la cocina, caminé sigilosamente, esperando no ser descubierta, asomé mi cabeza y si, ahí se encontraba Justin de espaldas a mí - "No que muy vergonzoso" - al escucharme hablar, se giró rápidamente, apunte su vestimenta que solo se basaba en su bóxer - "¿Quién lo dijo que lo era ahora? Las cosas pueden cambiar, ______" ­ - alce una ceja ante su argumento - "De la noche a la mañana" - dije mientras me sentaba en uno de los bancos que había - "¿Se puede saber que estás haciendo?" - mencione señalando el sartén que estaba en la estufa.

Él lo vio antes de dirigir su mirada de nuevo hacia mí - "Pan francés" - lo miré con el ceño fruncido durante un segundo antes de acercarme a la estufa, olía delicioso - "Que buen chef me resultaste ser" - le giñe el ojo, antes de tomar el mango del sartén para servir el desayuno, de reojo vi como Justin apago la estufa; puse los platos en la encimera, Justin se encargó de servir el jugo, ya los dos sentados nos dispusimos a comer - "¿Y qué tal?" - escuche a Justin preguntar, planté mi vista en el confundida, él se encontraba concentrado en su comida - "¿De qué hablas?"

- "Ya sabes...anoche ¿qué te pareció? - Movía su tenedor - "¿Esperas que conteste eso?" - dije con cierta ironía, después de lo que me pareció una eternidad el me miro - "Si" - dijo en un susurró ronco; antes de que pudiera darme cuenta ya lo tenía frente a mí - "Hazlo" - enterró su cabeza en mi cuello mientras se colocaba entre mis piernas, negué rápidamente - "¿Por qué no?" - Susurro plantando un beso húmedo en mi cuello - "No lo haré, simple" - en mi voz se podía notar lo nerviosa que me encontraba, me maldecí internamente - "¿Por qué tan nerviosa, nena?" - ¡dios! Ya comenzaba a sentir mi centro húmedo - "¿Y tú por qué tan pervertido, Bieber" - intente ocultar mi nerviosismo, pero no funciono - "¿Por qué siempre contestas con una pregunta, ______?" - su voz ronca contra mi oído estaba provocándome.

Sus manos se posaron en mis caderas - "La situación te esta excitando ¿si no me equivoco?" - Su risa inundo mis tímpanos - "Al parecer no soy la única, Bieber" - dije al sentir su miembro en mi centro - "Podemos ayudarnos mutuamente" - susurró a unos milímetros de mis labios - "¿Quién eres?" - Sus ojos me miraban fijamente - "¿De qué hablas?" - Dijo acercándome más a él, si era posible - "Y yo soy la que contesta con más preguntas" - conteste sarcástica, su agarre se hizo más fuerte en mis caderas como señal para que continuara - "Hace unas horas estabas tan rojo como un tomate ante la idea de estar desnudo frente a mí y ahora te me estas insinuando ¿qué paso con el otro chico?"

"Solo soy un chico que conoció un exquisito placer, el cual le gustaría repetir" - tomó mi labio inferior entre sus dientes, para después dirigir una de sus manos hacia uno de mis seno, gemí ante su contacto - "Mmm... sin ropa interior" - coloque mis manos derredor de su cuello para un mejor agarre, sus labios se juntaron con los míos, mientras el subió un poco mi camiseta, se separó lentamente de mí y dirigió su mirada hacia abajo, yo también seguí su vista y me di cuenta de cómo comenzaba a hacer círculos en mi clítoris - "¡Dios, Justin!" - su agarre se formó en mi cintura, su vista se enfocó en mi rostro, sus ojos estaban casi negros, de un momento a otro uno de sus dedos ya se encontraba dentro de mí, instintivamente junte mis labios tratando de no emitir algún gemido - "Anda, nena. Quiero escucharte" - negué lentamente - "Esta bien" - quito su mano de ahí, lo mire sorprendida pero mi sorpresa incremento al ver como dirigía su mano a sus labios para así eliminar los rastros de mis fluidos de esta - "Deliciosa" - mis ojos estaban clavados en sus labios, sentí como se alejaba de mí, rápidamente coloque mis piernas alrededor de su cadera - "¿A dónde vas?" - Susurre en su oído - "Condón" - dijo mientras trataba de alejarse, de nuevo, yo de nuevo lo atraje hacia mí pero ahora con mis manos, el me miró confundido, yo le sonreí antes de bajar su bóxer - "Pero..."