ACTO II (Treceava Escena)

Start from the beginning
                                    

Hurtina: (sincera) Eldo, creo que ahora necesito saber sobre tus pasatiempos. Créeme que te lo pregunto para saber en qué horarios puedes trabajar. Obviamente que si trabajas más entonces vas a ganar más. Yo tengo una hija llamada Irlene y ella me cuenta que hace unos días vino un ex amigo de ella a interrumpir el cumpleaños de Omuruelo.

Eldo: (sincero) Yo era el chico que interrumpió ese cumpleaños y espero que eso no arruine nuestra relación laboral. Además, pienso que usted no se debería entrometer en los problemas personales que yo pueda tener. Es mi única responsabilidad aclarar que su hija es un poco grosera y tal vez no me crea, porque es su madre.

Hurtina: (sincera) Obviamente que eso no debería interferir en nuestra relación laboral. Desde ahora, solo te voy a ver como el chico que me habla de mi hija y que ahora anda buscando empleo. Te recomiendo que no busques problemas con mi hija, porque a veces suele ser malhablada y luego eso me afecta a mí.

Eldo: (sincero) Mi nombre es Eldo y no quiero tener problemas con usted. Solo busco que ahora usted me siga preguntando sobre mi vida sin tocar asuntos personales, porque no quiero que usted empiece a mezclar mi desempeño laboral con mi propia vida personal. Le exijo que se mantenga alejada de mi privacidad. Usted debe entender que no busco traerle problemas o al menos no por ahora.

Hurtina: (sincera) Eldo, mi nombre es Hurtila y debo contarte que me interesa conocerte para saber si te voy a contratar. Debo estar segura de que eres responsable con tu trabajo, porque luego no quiero estar detrás de ti para decirte lo que debes hacer. Debes ser responsable de tu propio trabajo, porque eso te va a servir después.

Eldo: (honesto) Lo sé y desde ahora le digo que no voy a confundir mi vida personal con mi empleo. Le comunico que no planeo hablar de su hija, porque quiero conservar mi empleo. Además, creo que usted necesita un poco de paciencia conmigo, porque no lo voy a hacer todo bien a la primera. Jamás he trabajado en una pastelería y quizás esta sea la oportunidad que estoy buscando.

Hurtina: (sincera) ¿Cuál es tu motivación para trabajar o solo buscas que yo sienta lástima por ti y que tu conexión con mi hija sea un motivo para que te de empleo? Espero que tú no tengas intención en hacerme daño, porque yo no busco interferirme en tu vida personal. Recuerda que solo soy tu jefa y no tu propia madre. 

(Eldo Lunte Banto le sonríe a Hurtila Riltela y la mira de una forma calmada)

(Hurtila Riltela arquea la ceja izquierda hacia arriba y Eldo se sorprende)

Eldo: (honesto) Mis pasatiempos favoritos son escribir y comer. Amo escribir y probablemente me vaya a convertir en un cuentista. En realidad, a mí me encanta leer, pero no tengo tanta plata para comprarme muchos relatos. Además, admito que me encanta la narrativa de Julio Ramón Ribeyro. En realidad, me interesa escribir en mi tiempo libre.

Hurtina: (sincera) Veo que tienes gustos literarios. En mi caso, creo que yo estoy a punto de confesarte de mi amor por los libros. Al igual que tú, me encanta escribir, aunque a veces por este trabajo no tengo mucho tiempo. Espero que podamos convivir con ese gusto literario en común. Creo que nos vamos a llevar muy bien.

Eldo: (honesto) Hurtina, usted parece que solo quiere contratarme en base a mis gustos personales. No quiero que surjan malentendidos entre nosotros. Yo busco ganar dinero más que cualquier cosa. He venido a esta pastelería para que mis padres vean que yo no soy un vago. No quiero arrepentirme de trabajar aquí.

Hurtina: (sincera) Eldo, quedas contratado. Ahora vamos a esperar al jefe para que apruebe que puedes trabajar aquí. No es mi responsabilidad que ese hombre empresario llegue un poco tarde en ocasiones, porque tiene que atender problemas personales de su familia que no puedo contar, porque es su vida personal.

(Ingresa Kirno Ritko caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

Kirno: (educado) Buenas noches, Hurtila. He venido en esta ocasión a decirte que te voy a pagar en unos días lo que te debo. Espero que no te enojes mucho, porque ahora necesito que empieces a trabajar más seguido en esta pastelería. Requiero tu mayor atención en este caso para poder administrar a la pastelería.

Eldo: (cordial) Buenas noches, señor. Soy el nuevo empleado de esta pastelería y quisiera saber si es que puedo trabajar aquí. No tengo mucha experiencia en el negocio, pero puedo aprender un poco para poder darle lo mejor al cliente. Espero que usted no me malentienda y podamos llevarnos bien en cierto punto. 

Hurtina: (cortés) Kirno, aquí te presento a Eldo. Es un chico que todavía no sabe lo que es trabajar de verdad. Te puedo recomendar que le vayamos enseñando algunos aspectos de nuestro trabajo, porque parece que todavía es muy novato para que sepa afrontar la presión laboral. Me voy a encargar de enseñarle a Eldo sobre cómo laborar aquí.

Kirno: (educado) Veo que todavía te encargas de ensenar a los novatos, Hurtina. Eldo, te voy a aceptar, pero espero que no decepciones. Recuerda que en el trabajo no se puede bromear ni contar chistes y menos insultar a las personas. Este oficio es serio y necesita de tu parte para que funcione de una forma adecuada.

Eldo: (cordial) Está bien, jefe. Yo mañana pienso volver para empezar a trabajar. Espero que Hurtina sepa sobre cómo enseñarme para que le entregue lo mejor al cliente y por supuesto tener un buen desempeño como trabajador. Es recomendable que vaya preparado el día de mañana.

(Eldo Lunte Banto se retira caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

(Kirno Ritko se retira caminando al escenario por el pasillo derecho)

(Hurtina Riltela se retira caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

(Cierre del telón) (Fin de la escena XIII) 

ELDO (Obra teatral de cumpleaños)Where stories live. Discover now