Capítulo tres

15K 982 107
                                    

Había acabado la hora de francés, según Aida teníamos una hora libre. En mi antiguo instituto no teníamos esa horas libre, pero desde luego que no me quejaba.

Me encontraba sola, sentada en las gradas del amplio campo de rugby. Al parecer es el deporte más casual en esta escuela. Traía conmigo un bloc de dibujo, con una rosa dibujada por mí en él. Según Aida dibujo muy bien, y me lo creo, ya que mi madre es -probablemente- la mejor dibujante del mundo. Mi rosa no ocupa más de tres cuartos de la hoja. Se supone que era un boceto, pero dado el hecho dw que lo he trazado bastante bien, creo que me gustaría conservarla.

Seguí dándole pequeñas mejoras gracias a mi lápiz HB2, un lápiz que según Internet, era de buen uso para dibujar.

- Bonita rosa- oí decir detrás de mi. Giré mi cuerpo para encontrarme con Nick, un miembro de la peligrosa banda The Black Band.

Me quedé mirandolo con una expresión de duda en mi cara, asta que pensé que debería lucir ridícula y cambié de expresión.

- Gracias- le regalé una sonrisa tranquila, digo yo... No me haría nada...¿No?

Él en cambio se sentó en la mini silla a mi lado, y me moví incomoda por la situación. ¿Qué puedes hacer cuando un miembro de la "supuesta" banda más peligrosa del instituto te está
hablando como si nada? Yo actuaría normal, o lo más normal que mis asquerosos nervios me dejaran. Dios dabe que no somos buenos amigos.

Descubrí que Nick sabía dibujar muy bien, le dimos unos retoques a la rosa, y insistí en que se la quedase él.

- Puedo hacer otra en casa, de verdad que no ea molestia- le regalé una sonrisa.

- Wow, muchas gracias, a mis amigos les encantará- me dio un leve "abrazo" y se fue sin dejarme decir una palabra.

¿Iba a enseñárselo a sus amigos? ¿The Black Band?

(...)

Recogí mi pelo dorado en una trenza. Me miré en el espejo de mi taquilla número 3788, y me arreglé un poco la sombra de ojos, sonó el timbre y caminé sola hacia mi próxima clase. Biología.

Al sentarme en mi pupitre, giré mi cabeza y vi que Ryder Mártin estaba en la mesa de detrás de mi, pero sin mirarme. Me removí incomoda en mesa.

Tenía al ser más peligroso del instituto detrás mio.

Socorro.

(...)

Actualmente estábamos en clase del señor Newman, el profesor de biología (como he dicho antes) y yo tenía unas ganas de morir ahí mismo enormes, gigantescas y descomunales. Estábamos dando la reproducción sexual de los animales, y llegó el gracioso de clase que preguntó: "Si las abejas son animales que hacen la reproducción sexual, ¿Copulan en el aire?" Y como buenos estudiantes nos reímos. No conocía muy bien a ese muchacho, pero puedo decir sin equivocarme que será grande en la vida (mentira).

A simple vista parecía mayor que todos, ya que le sobresalía alguna que otra cana. Un adolescente con canas es lo más normal del mundo (otra mentira). Era regordete y con ojos oscuros, nada del otro mundo.

Sentí que mi trenza se movía, y a continuación una mano rasposa tocarme el pelo. Me puse muy nerviosa, -y quién no- si un desconocido empieza a tocarte el pelo en clase, así que opté por el plan B (ya que el plan A era girarme y plantarle cara); parar atención en clase, pero su mano seguía sin moverse de mi cuero cabelludo, y
que empezaba a quitarme la goma de pelo, fue deshaciendo mi bien peinada trenza y escampó mi pelo por mis hombros, haciendo caer una cascada rubio oro por mi espalda y omóplatos.

-Mucho mejor.

Tenía decidido girarme y plantarle cara (plan A), pero a último segundo eso me pareció una terrible idea, ya que probablemente me sacara como dos cabezas y tuviese el triple de fuerza que yo -aunque no es difícil tener más fuerza que yo-.

Después de cinco minutos más de clase -en los que siguió tocandome el pelo- el bendito timbre sonó y no me pude alegrar más, creo que hasta pegué un salto en la silla de alegría.

- Adiós Rosita- oí murmurando en mi oído. Después vi a Ryder caminar por delante de mi y salir de clase tan pancho.

¿Qué acaba de pasar? Que alguien me lo explique por que no lo entiendo.

Toqué suavemente mi sedoso pelo, y no pude evitar que una sonrisa saliera de mi boca. Estúpidos encantos rebeldes.

(...)

- Rob te nota muy distraída- comento mi raro amigo Robbie Williams.

- Lleva así desde Biología, ¿tú que crees? Se ha sentado delante de Ryder- explicó Aida. ¿Eran conscientes de que seguía ahí?

- ¿Sabéis que sigo aquí no?

- Si- respondieron al unísono.

Genial. Que amigos me he buscado.

- Oye, cambiando de tema ¿Cómo os ha ido el examen de castellano? Yo lo he hecho a duras penas, y ni así...

- A Rob le ha ido bien, y a Aida también, el ejercicio 8 era el más difícil, Rob se lo ha dejado.

- Oye, Rob ¿Porqué hablas en tercera persona?- obviamente yo formulé esa pregunta, ya que Aida conocería la respuesta.

- Rob no lo sabe, le enseñaron así.- dijo Robbie Williams.

-Ah... Muy normal eso...

Rob solo sacudió los hombros.

Estaba acabando mi delicioso pollo frito con patatas cuando oímos un fuerte estruendo, y a continuación un taco como el de un camionero a varios decibelios de volumen.

-¡JODER!

Aida y yo nos miramos, y Rob en cambio estaba jugando a los marcianitos en su móvil. Obviamente me asusté, con la mirada pedí una explicación a Aida, que solo me dijo:

- The Black Band.

Tragué saliva lentamente y dirigí mis ojos castaños hacia la mesa de los rebeldes, y no fuí la única, varias personas (por no decir todos) hacían lo mismo que yo.

Nick alzó la mirada y se encontró con la mía, y articuló con la boca: "Perdón"
Lo siguiente fué ver como todo el grupo enfadado (en especial Ryder que fué el dueño del insulto) salían del comedor dejandonos anonadados.

Este cap se lo quiero dedicar a Merii_Pasteliita que me da muchiismioos ánimoos para seguir escribiendo.
Te amooooo ¡Dylan O'brien al poder!

Atte: Ari <3

Instagram: xrixdnxx

He Is My Rhen #HermanosOscurosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora