Capítulo 8: "Beso al ángel"

Bắt đầu từ đầu
                                    

Necesitaba consumir.

Tras mi primer viaje con la cocaína, pensé que no podía existir nada mejor que estar envuelto por el fragor de la nube. Me hacía sentir increíble conmigo mismo. Me llenaba de confianza, de seguridad, envolviéndome en un manto cálido y agradable que brindaba la suficiente energía como para poder hacer cualquier cosa.

Tenía adicción a esa sensación: la omnipotencia. Yo tenía el poder. Si quería, podía convertirme en lo que yo quisiera. Pasaría por encima de quien fuera, porque nadie era mejor que yo. Los demás eran porquería, completamente inferiores a mis capacidades.

Pero al cabo de veinte minutos, lo que le seguía era un infierno en la Tierra. Justo como esta molesta sensación.

De cualquier forma, estaba dispuesto a correr el riesgo. Llevaba dosis extras conmigo y cuando mis reservas peligraban, una visita a Tim, un par de billetes y una sonrisa coqueta bastaban para conseguir más.

No había límite para lo que pudiera consumir, especialmente porque papá ya no controlaba en qué gastaba el dinero que me depositaba en el fideicomiso. Era un adolescente que heredó dinero infinito. La cuenta nunca había llegado a cero y papá no daba muestras de tener conocimiento acerca de mis movimientos bancarios.

Tampoco era como si le fuera a interesar.

Escuché ruido de pisadas acercándose y me mantuve alerta. Escaneé a mi alrededor en busca de quien osara importunar mi calma, hasta que di con una pomposa cabellera rubia que surgió desde detrás de unos arbustos.

Sonreí de medio lado al saber que cayó justo en mi trampa.

La cosa era que hice mi propio gran hallazgo. Descubrí que el aula de Jimin daba justo hacia esta área donde me gustaba esconderme y, según compañeras suyas que aprovechaba a besar y manosear durante ciertos recreos en el baño, se pasaba sus clases con la mirada perdida hacia la ventana. Por eso me descubrió la otra vez: él esperaba por el momento justo para emboscarme.

–Sabía que vendrías –le dije, haciendo un escaneo lento de lo bien que se veían sus delicadas piernas bajo la faldita del uniforme, a medida que se aproximaba. Deseaba tanto volver a presionar su carne, masajearla bajo mis manos.

¿En qué clase de pervertido me convertía Park Jimin?

–No te confundas. Sólo estoy aquí porque quiero una explicación.

Oh, vaya. El tonito de enojo y los bracitos cruzados sobre el pecho le daban una mayor expresividad a su rostro enfurruñado. Lo volvían caliente.

–¿Explicación de qué? –le desafié, riéndome de él. Eso le disgustaba de mí, le ponía de los pelos. Podía notarlo.

–Tuve que afrontar una llamada de atención por parte del director por la escapada del otro día, Taehyung. Te cubrí, así que merezco saber lo que pasa.

–No te pedí que hicieras nada por mí.

–De todas formas lo hice, porque me...

–No me vengas con esa mierda de que te interesas por mí –lo corté, tajante, plantándome sobre él–. ¡No tienes ni puta idea de nada y apareces como si fueras alguna clase de maldito psicólogo que cree entender cómo me siento!

Fui testigo del instante en el que sus ojitos se cristalizaron, una vez más. Sonrió con la misma tristeza de aquella vez en el bar, buscando recomponerse.

Sus deditos tibios caminaron sobre la barba incipiente de mi mandíbula, pasaron por detrás de mi cabeza y se anclaron en mi nuca, manteniéndome ahí, a un palmo de distancia.

–Quiero entenderte –susurró–. Por favor, ¿me dejas?

Me tuvo. Por un segundo me sentí caer dentro del abrigo de esos hermosos ojos verdes. Pude palpar su intranquilidad, lo mucho que le angustiaba que yo anduviera a la deriva.

Before the baby ║ Kookmin/VminNơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ