» Capítulo Diez

256 41 21
                                    

"Hasta el día en que deje de respirar,
no podría dejarte ir."

Deja Vu; Dreamcatcher.



Wooyoung.



Las cosas comenzaban a salirse de control. La noche del viernes se había convertido en la madrugada del sábado cuándo llegamos a mi casa a encontrarnos con Yeosang. Agradecía el hecho de que Seonghwa estuviera en su habitación, así que dejando pasar a San, nos dirigimos directo a mi habitación.

Yeosang me mira totalmente confundido y se acerca a mi a paso lento, cómo si Choi San fuera capaz de verlo. Yo suspiro, me siento en la cama y tengo a ambos chicos mirándome totalmente confusos, pero sin decir nada. Cierro los ojos unos segundos, organizo mis pensamientos y vuelvo a abrirlos con una bocanada de aire que me ayuda a calmar mi corazón extrañamente acelerado.



— Bien, Choi San. Sé que puede sonar raro, pero Yeosang está a tu lado.


Yeosang grita. — ¿Estás loco? ¿Cómo le hablas sobre mi?


San se retuerce, cómo si tuviera frío. — Acabo de sentir una corriente eléctrica a mi izquierda.


Asiento. — Es Yeosang, está molesto. —Digo— Según leí, algunas personas pueden sentir las presencias espirituales. Personas que son creyentes o débiles de mente son más propensas a sentir estos fenómenos.



Ambos comienzan a caminar en círculos, chocando entre ellos y San sintiendo ese escalofrío recorrer su cuerpo en cada ocasión que esto sucedía. Me quiero reír, pero la situación por la que estamos pasando me tiene muy tenso. Los sueños ya no eran eso. Los estaba demostrando y alguien más fue capaz de escuchar lo que decía. Chasqueo la lengua, ambos me miran y yo vuelvo a suspirar. Me levanto, quedando frente a los dos quienes no dejan de mirarme.



— Yeosang, tuve otra vez ese sueño.


— ¿Otra vez? — Pregunta San— ¿No fue la primera vez? ¿Es un patrón?


— El chico pregunta mucho, creo que deberíamos deshacernos de él. — el rostro de Yeosang estaba serio.


Choi San tembló. — Siento una presencia maligna.


Sonrió y asiento. — Sigue siendo Yeosang.


Yeosang suelta un bufido y se cruza de brazos. — Insisto.


— Ya basta, Yeosang. San me está ayudando. Creo que sabe mucho sobre el tema y es mejor tener aliados que crean en nosotros, ¿no crees?


— Puedo conseguir aliados por mi cuenta, Wooyoung.


— ¿Por qué estás de mal humor? Choi San no te hizo nada.


San parecía triste. — ¿Yeosang me odia?



Niego con la cabeza, veo a Yeosang cuestionándose el por qué de su reacción hacia él y a San un poco decepcionado por cómo Yeosang lo estaba tratando. Y eso que no puede escucharlo. Vuelvo a suspirar, pensando en si fue una buena idea que ellos se conocieran.

La mano repentina de San en mi espalda y su cara tan pegada a mi rostro me hace temblar y estar confundido por completo. Veo la preocupación grabada en su rostro, pero empiezo a preocuparme por lo rápido que mi corazón está latiendo ante él.



— ¿Estás bien? — Pregunta.



Mis ojos van hasta Yeosang que se queda mirándome con los mismos ojos de preocupación que Choi San tenía y sólo hace que la situación en la que me encuentro se me haga aún más extraña. Siento cómo si me hubiera perdido de algo del cuál no tengo conocimiento. Cómo si estuviera viendo algún tipo de serie y me perdiera el capítulo anterior. Por eso, tan pronto Choi San me suelta y yo me quedo mirándolos extrañado, ellos muestran la misma confusión que yo al instante.



Cursed Eyes » SanWooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora