Internado solo para chicas ||Min Yoongi||

Capítulo 8

Min Yoongi

Luego de lo ocurrido, Hoseok y yo volvimos a la mesa como si nada hubiera pasado. Pero ahora es de noche y estoy dando vueltas por nuestra habitación, pensando en si debo o no enseñarle ese vídeo.

—Hola Yonmi, ¿qué sucede?—preguntó Yuna.

—¿Y Sumin?—pregunté.

—Se quedó discutiendo con Hoseok por celular, al parecer él no puede pasar su fin de semana con ella—explicó.

—Hoseok engaña a Sumin—confesé.

—¿Cómo lo sabes?—pregunté.

—Mira esto—dije y le enseñe el vídeo.

—Es un idiota, si tan solo pudiéramos darle una lección—dijo Yuna.

—Es por eso que debemos enseñarle el vídeo a Sumin para que termine con Hoseok, de una buena vez—dije y ella negó.

—No, haremos que se de cuenta ella sola, hay que tratar de convencerla para que siga a Hoseok el fin de semana—dijo Yuna—estoy segura de que se va a ver con esa chica y Sumin terminará con él.

—¿Y si no funciona?—pregunté.

—Le enseñamos a Sumin el vídeo y que termine con él—dijo Yuna.

—Está bien, hagámoslo así, solo espero que ella no termine lastimada—dije y ella me miró.

—Cuando se trata de amor es imposible no salir lastimado—dijo Yuna y suspiró.

Fuimos interrumpidos porque Sumin llegó llorando a la habitación y se lanzó de cara en la cama.

—Linda, ¿qué sucede?—preguntó Yuna.

—Él me está mintiendo—dijo entre sollozos.

—Ya no llores, ¿por qué dices eso?—pregunté aunque era más que obvio.

—Primero que iba a salir con Jin, luego con su hermana, él me está ocultando algo—dijo y lloró.

—Oye Sumin y si este fin de semana lo sigues y descubres la verdad, así ya no sufrirás más—dijo Yuna.

—No lo sé Yuna, quiero confiar en él—dijo Sumin.

—Es una buena idea, así descubrirás si él dice la verdad o no—dije y pase mi mano por su espalda.

—¿A caso ustedes saben algo?—dijo y se dió la vuelta para vernos.

—¿Nosotras?—preguntó Yuna—claro que no.

—Es solo que también lo notamos algo extraño a la hora del almuerzo—confesamos.

—Tienes razón, lo haré, ya que él no me quiere decir la verdad—dijo Sumin decidida—ahora me disculpan me iré a poner pijama, solo quiero dormir.

Dijo y entro al baño sin embargo desde afuera la escuchamos sollozar.

—Ella merece algo mejor—dijo Yuna y yo asentí con la cabeza—sin embargo tú tienes prohibido enamorarte de ella.

—Ya lo sé, pero no lo puedo evitar, es tan hermosa y dulce, mi chica ideal—dije y sonreí.

—Ay agente Min, estás perdido—dijo y puso su manos por su rostro—solo espero que no te despidan por incumplir las normas.

Sumin salió con sus ojos hinchados y se acostó en su cama, sin decir una palabra, solo se cubrió hasta la cabeza con sus mantas.

Si ella fuera mi novia, me encargaría de que sea feliz todos los días. Aunque  también hay el riesgo de que ella sufra, cuándo le diga que me contrataron solo para ser su guardaespaldas y encima me infiltré en su internado, como su amiga.

Sin embargo es un riesgo que estoy dispuesto a tomar, para poder tener una relación con ella.

—Bueno yo también me voy a dormir—dijo Yuna y se acostó en su cama.

Yo también hice lo mismo y me fui a poner pijama, sin embargo cuando quise ir a dormir Namjoon me llamó.

Llamada

—Jefe Kim, ¿hay noticias?—pregunté.

—Así es agente Min, descubrimos que alguien tiene la orden de espiar a Sumin, por eso necesito que revises toda la habitación y busques micrófonos o cámaras.

—Entendido, lo haré—dije serio.

—Y dile a Yuna que te ayude también, eso sí sean discretos—dijo Namjoon.

Fin de la llamada

Regresé a la habitación y desperté a Yuna, debemos buscar las cámaras ahora, antes de que sea demasiado tarde.

—¿Qué sucede?—preguntó adormilada.

—Vamos a buscar cámaras levántate—dije y ella me miró sin entender nada—alguien mando a espiar a Sumin.

Buscamos primero en el baño pero solo encontramos un pequeño micrófono detrás del espejo, lo quitamos y después empezamos a buscar por toda la habitación, pero solo encontramos tres cámaras con micrófono.

Para no hacer mucho ruido, las recogimos y salimos de la habitación, para destruirlas por completo y dejarlas en la basura.

—Creo que mandaron a vigilar a Sumin, para encontrar el momento más adecuado para matarla—dijo Yuna asustada.

—No dejaremos que eso pase y más ahora que sabemos está en peligro—dije y ella asintió.

Fuimos a la habitación y vimos a Sumin dormida, ahora más que nunca debo cuidarla, si la misión falla, no solo voy a  perder mi trabajo como agente, sino también habré perdido a la chica de mis sueños y jamás me lo perdonaría.