Parte 1 Percy y Annabeth

961 69 7
                                    

Percy tenía los músculos agarrotados.

Rodó en su cama y se limpio el hilillo de baba que se había formado en la noche.

Se asomó por la ventana y descubrió un hermoso cielo celeste que se reflejaba en el mar.

La tranquilidad surgió de su pecho y dejo un suspiro de regocijo. Era domingo.

Percy se había pasado la semana entera entrenando para, en un mes más, volver al mundo mortal y terminar la secundaria.

Pero aquel día necesitaba un descanso, no había clases de lucha libre, ni griego antiguo ni (los Dioses los libren) arquería. Solo un día normal (lo suficiente para un semidiós) junto a Annabeth.

Percy se vistió y luego se fue a dar una ducha fría sin necesidad de toalla.

Luego, se peino (o hizo el esfuerzo.)

Al salir de la cabaña, respiro el frió aire marino y sonrió. Fue a el comedor y se lleno con panqueques azules.

Se notaba en el aire que todos estaban tranquilos disfrutando del día. Percy no vio en ningún lado a Annabeth, por lo que supuso que estaba en su cabina haciendo cosas para cerebritos y todo eso.

El hijo de Poseidón tomo un plato y lo lleno de distintas cantidades de comida para luego ir a la cabaña de Atenea,

-Ey- dijo cuando entro en el paraiso de los de Atenea.

Y, como bien había supuesto, Annabeth se hallaba en un rincón con un portátil que habían comprado hacia dos semanas.

Su novia llebava una camisa desteñida del campamento y unos baqueros cortos. El pelo sin peinar y amarrado en una coleta suelta.

Percy pensó que se veía mas hermosa que nunca.

-Toma- dijo Percy sentandose a su lado.

- Jason esta fuera -respondió mientras veía sus mapas del Olimpo.

- No, te traje el desayuno.

Levantó la vista enojada, pero al ver a Percy, su expresión se suavizo.

- Oh, gracias.

Tomó el zumo de naranja y dio un sorbo.

- He estado pensando...- empezó.

- ¿Mucho o poco?- inquirió Percy.

- Demasiado - respondió sonriente-. Como la semana pasada fue tu cumpleaños y nuestro aniversario de un año como novios, podríamos celebrarlo fuera en...

- ¿Un restauran en París a la luz de las velas?

- Mmmm... No.Demasiado caro. Quizás en algún parque, ya sabes:un picnic en algún lugar tranquilo...

Percy sonrio y la beso:

- Siempre que esta contigo- dijo su novio.

Annabeth sonrió-. Sesos de algas

EDITADO <3

Domingo entre semidioses...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora