We are going (TimeBomb)

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<<recognition and truth>>

Su paseo fue rápido, pasaba con tiendas comprando todo lo necesario y algunas cosas mas con las que pronto crearia algunas nuevas cosas en su hogar, habian varias cosas que allí no se podian encontrar.

Cosas Ilegales por ejemplo

Una fuerte explosión resonó en su espalda, cerca de algunos puestos, no fue muy potente pero tuvo el sonido necesario para que terminara buscando la causa de este.

–¡Callese y denos todo lo que tiene!– un joven que concidero el lider hablo a una de las señoras de la tienda que refugiaba tras de su vestido a un niño.

A su lado otros jovenes tomaban sus latas de pintura y ponian su marca en varias de las paredes y telas del local.

Todo hubiera estado bien, ella hubiera seguido las ordenes de su pareja si no fuera por un pequeeeeeño inconveniente.

"Jinx estuvo aqui"

¡Disculpa!¿Por que su nombre se encontraba plasmado por ellos en la escena?

–¡Oigan mocosos!–el grito Jinx, los jovenes Zaunitas centrado su atención a la mujer–No deberían estar poniendo el nombre de alguien sin su permiso. –intento que sus palabras fueran calmadas y severas.

Silco hablaba asi

Los jóvenes se burlaron, no obedecían a los vigianlantes, mucho menos a una estúpida mujer encapuchada.

–Nosotros seguimos los pasos de Jinx –dijo uno con orgullo– somos el futuro ¡seremos la anarquía! ¡Seremos superiores! –otros miembros apoyaron al joven, gritando.

–tu espectáculo es estupido, ¿atacar Zaun? –la mujer rio–es cobarde. Niños–se burlo.

–¡¿que digiste?! –el joven se enojo, su plan de robar el lugar había cambiado de rumbo. Señalo a la mujer con su arma.

–No me desprestigen, mocosos– ninguno puso atención a sus palabras, el pensamiento de cada uno de los jóvenes se alineo.

Nisiquiera necesitaban las armas, era sólo una mujer indefensa.

Los primeros tres se arrojaron hacia ella, los expectadores se alejaron un poco del lugar.

Nisiquiera uno pudo rozarla.

En cuestión de segundos, tres jovenes en el suelo, Jinx se agachó y cogio una de las armas de la joven a sus pies.

Anticuada–penso–pero servira.

Los demas se lanzaron hacia ella, decidio dejar su lugar, corriendo hacia adelante.

Su cuerpo aun estaba en forma—agradeció a Ekko y sus entrenamientos nocturnos— aun que su fuerza y agilidad habian disminuido, el brillo estaba desapareciendo de su cuerpo, de una forma lenta, pero que dejaba grandes notoriedades.

Nisiquiera tuvo que usar el arma, solo advirtió un poco con la misma, se basto solo de sus patadas y esquivadas. El abrigo era molesto, pero se podia adaptar.

Estaba cerca, el lider del grupo dejó que un brillo de miedo fuera a su mirada. Duro instantes, pero Jinx lo noto.

como amaba esa sensación.

La rabia se dio en el joven, dio unos cuantos balazos que pudo esquivar con facilidad mientras se deshacía de otros dos que la intentaban golpear.

Con una simple patada logro tumbar al chico, el arma lo apuntó , justo en la cabeza.

El miedo se plasmo en su mirada.

Si... El poder.

Estuvo segura que su miedo era por el arma, por como habia vencido ella sola al grupo entero. En parte si, pero lo que dijo la dejo helada.

–S-Señorita Jinx–los ojos de colores convinados de la mujer se agradaron.

No lo había notado

Por los movimientos violentos y fuertes la capulla habia abandonado su cabeza, su trenza se desplegaba por su espalda, por ensima de la ropa que la cubría. Su tan reconocido cabello.

En ese momento sintio todas las miradas sobre ella, tanto de los comerciantes y los que pasaban, como de los heridos jóvenes que la observaban desde abajo.

–N-nosotros lo lamentamos–la voz del chico bajo ella estaba quebrada, a punto de llanto. –s-solo queríamos, ser como usted–las primeras lagrimas se deslizaron por su mejillas, sus manos estaban altas y temblaban, rogando–no queríamos que la olvidarán, nosotros...

Jinx lo corto.

–No necesitó que me involucren con crímenes estupidos a Zaun–su voz era temeraria.–no vuelvas a usar mi nombre niño–el chico sintio que era la confirmación de que iba a vivir.

Jinx arrojó el arma, callo como basura en la pila de madera. Ninguno se atrevió a siquiera tocarla.

–si quieres causar problemas–dejo su posición defensiva–Piltover esta llena de peces gordos, eres patético si atacas al que ya esta en el suelo.

Sabia como eran los jóvenes, se arriesgaban, pero el llegar a Piltover era un paso de terror.

Ella misma lo habia vivido años atras con sus hermanos.

Se aparto de ellos, localizó un lugar menos poblado y escapo por alli, tomando su maleta antes de eso y ocultando su cabello.

Mierda...

Ekko iba a matarla.

Esta vez si la habia cagado.

Corrio hacia su lugar seguro, intentando ser mas rapida que las noticias y chismes de Zaun, logro llegar a la casa en minutos, oculta.

Ya el daño estaba hecho.

Y lo pagaria.

...

El lider de los Firelights miraba la reunión, sus cabos estaban atados. Cada uno de ellos eran pegados con dolor en su mente. Uno de los Firelights corrio hacia el, su cuerpo se tenso cuando dio el informe, asintió y le dio una mirada tranquilizadora.

Lo sabia. Volvio su mirada a la escena.

La agente de Piltover se dependía de su amigo y su hija. Dio unas caricias en el revoltoso cabello y sonrió al joven.

Una vista muy diferente a la de horas antes.

Despues de la despedida el joven se h
acerco a él, sonriente, La niña volvio al jugar con los demas niños del lugar.

–eso fue dramático–se rio el mas joven, pero Scar siguió en su posición, serio–¿pasa algo? –la expresión del hombre alertó a Ekko.

–han visto a Jinx hace unos minutos en Zaun. –los ojos del moreno se abrieron al igual que su boca–quiero que seas honesto conmigo.

Posiblemente sono como una pareja reclamando, en si lo era. Ellos eran una relación, de amistad y hermandad, pero una relación.

Los ojos del Moreno vagaron, incapaz de enfrentarlo.

No queria mentirle...ya no podía hacer nada.

–es verdad... –hablo suave, lo suficiente para que solo el hombre escuchara–es ella.

Sus sospechas fueron cerradas, era lo unico que bastaba.

Su decepción inundó su pecho, formando un nudo en su cuello.

A lo lejos miro como la pequeña morena de pelo azul tomaba el tiburon de juguete entre sus manos, haciéndolo mover, jugando con él.

–Te contare todo–Ekko miro a Scar, su mirada era una mezcla de tristeza y decepción–permiteme decirte la verdad. – su posición fue firme.

Algo que Scar admiraba del joven, su firmeza.

Aun queria confiar en él, aun quería pensar que era mentira, aun queria que su antiguo líder volviera y le dijera que siempre estaria para ellos.

Como un voto de confianza, igual que el que le había dado hacia tantos años cuando lo rescato a él y a su en ese entonces bebe.

Asinto, fue una subida silenciosa hasta la oficina que antes le pertenecía a Ekko, y ahora era suya.