𓏲 Capítulo 28

Start from the beginning
                                    

Respiró hondo y trató de relajarse, debía calmarse y no seguir sufriendo por lo inevitable, no tenía más opción que asimilarlo por más doloroso que resultara.

Lavó su rostro en el baño y se dirigió hacia la cocina, encontrándose con la comida que su madre había estado preparando antes de que recayera; una punzada en su pecho se hizo presente al notar que era su comida favorita. Suspiró sonoramente y se sirvió un poco, se sentó en el comedor, prestándole atención al abrumador silencio de su casa que solo la llevaba de nuevo hacia sus intranquilos pensamientos.

Dio el primer bocado, esbozando una corta sonrisa ante el esfuerzo que su madre había hecho en cocinarle después de tanto tiempo, y se odió a sí misma por un momento por mentirle tanto en cuanto a su vida, porque si de algo estaba segura, era de que iba a decepcionarla tan pronto le dijera que estaba con una chica, y no con un chico como tanto se lo repetía.

Con eso, no le quedaban más opciones que seguir ocultándolo, porque su madre era todo lo que tenía, y mientras pudiera seguir a su lado, haría lo posible por hacerla feliz tal y como estuvo haciendo toda su vida, aunque eso significara tener que seguir escondiéndose bajo promesas falsas que ardían en su pecho por no sentirse capaz de cumplirlas.

Ni siquiera por ella.

El día domingo se hizo paso rápidamente, lo que significaba que la semana de vacaciones había terminado tan rápido como inició

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

El día domingo se hizo paso rápidamente, lo que significaba que la semana de vacaciones había terminado tan rápido como inició.

El revoltijo que Sana sintió en su estómago toda la noche en la espera de su 'no cita' con Tzuyu, aún seguía presente, intensificándose más ahora que la hora acordada para verse se iba acercando. Trató de relajarse mientras se bañaba, dejando a un lado todo tipo de pensamientos que la hicieran ponerse ansiosa al respecto. Varios minutos después, salió del baño y se dirigió hacia su armario, en donde de manera ordenada y a la vista, había dejado el conjunto de ropa que con mucha dedicación buscó el día anterior en un vano intento de distraerse.

Hizo su rutina normal antes de empezar a vestirse; debido a que el clima estaba siendo un poco frío, eligió ponerse un no tan abrigado suéter color blanco con rayas azules en el centro, unos pantalones negros y unos tenis blancos. Se veía demasiado normal a su parecer, pero no es como si quisiera verse extravagante o diferente.

— Mamá, regreso en unas horas — avisó la pelinegra al bajar las escaleras a paso rápido con la intención de evitarse las preguntas de su madre. Pero no funcionó.

— Espera, ¿a dónde vas ahora? — la detuvo en la puerta, cruzándose de brazos.

— Yo, eh... Voy con Mina — sonrió con seguridad a pesar de lo nerviosa que se sentía — Lamento no decirte antes.

— Últimamente has pasado mucho tiempo afuera, tu padre no está de acuerdo con que salgas tanto tiempo y se molesta conmigo porque yo te dejo salir.

— Prometo que regresaré temprano — la miró con súplica — Regresaré antes de que papá venga para no meternos en problemas, ¿si~?

La señora Minatozaki suspiró rendida y asintió, confiando una vez más en su hija.

❝ Forbidden ❞ || MichaengWhere stories live. Discover now