Capítulo 2: Tipo de chica

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Mi desesperación por encontrar a mi propio Michael Hutchence me llevaría a una pasión amorosa, y está pasión para Lucrecio era una enfermedad muy peligrosa. 

Vamos con el soundtrack: "Everybody Wants to Rule the World" de Tears for Fears.

POV Nikola

26 de octubre de 1995

Los días, las semanas y los meses habían transcurrido de lo más normal. Cuando iniciamos las clases veía menos a Yara, quien las pocas veces que tenia la suerte de verle estaba borracha o con algún chico quien moría por llevársela a la cama. Yo había ingresado al Campus de Paddington la cual era exclusivo y el mejor en artes y diseño como arquitectura, diseño grafico, diseño de interiores, actuación, música y todo ese tipo de carreras, mientras que en el Campus de Kensington estaban todas las carreras como medicina, derecho y algunas licenciaturas. Ashton Irwin estaba en el Campus de Kensington y difícilmente podía verle, pero cada vez que tenía la oportunidad de mirarle aprovechaba para consumirlo y observar cada detalle de él, tenía algunos discretos tatuajes que realzaban su belleza, los había contado todos, en total eran cinco. Se había tatuado un águila en la parte de atrás del cuello, un corazón en la muñeca izquierda, el numero cinco en números unario en la muñeca derecha, y en cada brazo se había tatuado tres bolitas que iban cambiando de tamaño consecutivamente. Todo detalle lo había compartido con Ethan por teléfono, sin embargo, cuando habían llegado los segundos exámenes parciales del semestre parecía que no sólo Ethan sabía que estaba secretamente enamorada de Ashton.

–Es importante que estudien mucho para este parcial –Decía el Profesor Landon mientras veía su enorme libro. A muchos les había ido muy mal en el primer parcial de Calculo financiero por lo que, él había accedido a realizar clases extracurriculares para aquellos que más lo necesitaban. –Si no aciertan para este examen, ganar en el final será casi imposible y tendremos que vernos el próximo año, repitiendo... –Todos asentimos, mientras le miramos arreglar todas sus cosas– Bien, chicos, tengáis buen fin de semana, les veo el Lunes a las 8. Adiós.

Veo al castaño de la fiesta de bienvenida salir tras de él empujando a cualquiera que se interpusiera en su camino para poder alcanzarlo, pocas veces lo había visto y muy poco sabia de él. Cuando salgo de la clase le miro en el pasillo parado pensativo, como si le acababan de dar una mala noticia. Todos parecían observarle con curiosidad pero estaba segura que su mirada preocupada estaba aún puesta en el Profesor Landon que acababa de salir del edificio.

–¿Te encuentras bien? –Me atrevo a preguntarle. Él se vuelve a mirarme con furia. Vaya, la primera vez que lo había visto me había parecido tan amigable pero con esa cara parecía que quería matarme.

–No fastidies y sigue tu maldito camino. –Espeta. 

Estaba histérico, lo que me gustaría gritarles  a la cara a todos aquellos hombres que asimilan esa palabra con que nosotras las mujeres con frecuencia vivimos con histeria y en realidad ellos son aún más histéricos con tilde y punto final.  

–Como digas.. –Avergonzada sigo mi camino para también, salir del edificio pero en cuanto lo hago Ashton se cruza en mi trayecto, él iba en bicicleta a toda velocidad con un chico moreno colgándole de la espalda mientras soltaba carcajadas, les veo parar y tirar la bicicleta a la grama. Ambos se sientan en una mesa donde había un grupo ya de chicos y chicas conversando y llamando la atención por sus ruidosas risas.

Por mi parte, quería observarle y me moría por saber si tenia alguna pareja por lo que, tomo asiento en una mesa solitaria y empiezo a mirarle sin discreción, lo que yo no sabía, es que alguien más estaba mirándome y fijándose a quien se dirigían mi mirada y por quien suspiraba constantemente, imaginando como seria si Ashton y yo estuviésemos juntos.

HisteriaWhere stories live. Discover now