Raccionando a Encanto.

11#Dos oruguitas.

Narrador omnisciente:

-Había una sensación de paz en la habitación, ahora que se había dicho las mayoría de las cosas, todo se sentía mejor.
Para Mirabel era tan cálido; era una calidez reconfortante en su corazón y un peso menos en él. Además ahora que se ponía analizar la situación en la que se encontraba, veía que Antonio se había acomodado para estar en su regazo, Camilo todavía agarraba su brazo, y estaba más cerca de su tío Bruno.

~Se mostraba una rama espinosa,  que tiene un solo hilo rosa y una sombra que camina hacia adelante~

-Todos en la sala prestaron suma atención a esto, ¿Alguien finalmente había encontrado a Mirabel?

~Se veia a Mirabel llorando junto al río, con Abuela acercándose poco a poco a ella~

Abuela Alma: Mirabel-Llamó con suavidad.

-Alma sintió que una ola de tristeza y nostalgia la golpeaba al ver ese río de nuevo, nunca pensó que lo volvería a ver y mucho menos ir allí. 

Mirabel: Perdóname...no quería hacer más daño-Se disculpó mientras se secaba las lágrimas que caían por su rostro.

Bruno: No, nos lastimaste Mirabel, nos has hecho mucho más fuertes, y nos ayudaste a ver que somos mucho más que un don-Dijo dándole un apretón en la mano, y ella le dio una sonrisa apenada en respuesta. 

-Al escuchar las palabras de su tío, las hermanas y primos Madrigals también la abrazaron un poco más fuerte.

Mirabel: Solo quería… ser una persona que...
no soy-Añadió empezado a llorar de nuevo.

Abuela Alma: Nunca he sido capaz de volver aquí. Este río, aquí fue  donde recibimos nuestro milagro-Mencionó sentándose a su lado y mirando al frente.

-Alma no pudo evitar hacer una mueca de tristeza ante el recordatorio, había pasado tanto tiempo, pero la herida aún estaba muy fresca.
Todos los demás, estaban atentos por lo que iba a suceder.

Mirabel: Donde Abuelo Pedro...-Dijo mirando a su abuela al decir esto.

Abuela Alma: Creí que tendríamos una vida diferente...creí que yo sería una mujer diferente-Relató con tristeza.

Inició del Flasback:

~Se muestra una versión más joven de Abuela y cómo se conocieron Abuela Alma y Abuelo Pedro.
(Lo que sucedió a través de una mariposa amarilla) ~

Dos oruguitas enamoradas

-Alma sonrió un poco al ver sus recuerdos en la pantalla y aunque también sentía tristeza, se tomó el tiempo para recordar cada parte del rostro de su querido esposo. 
Todos los demás miembros de la familia observaban la pantalla fijamente no querian perder ningún detalle, porque aunque tenían un retrato del Abuelo Pedro en la casa y a menudo escuchaban historias, era totalmente diferente verlo realmente como una persona.

~Tuvieran una cita, su boda, cundo Abuelo Pedro se enteró que iba a ser padre, cuando tuvieron a sus tres hijos y la razón por la que se habían ido de su hogar. Su pueblo había sido incendiado y mientras cruzaban el río había gente siguiéndolos~

Pasan sus noches y madrugadas

Llenas de hambre

Siguen andando y navegando un mundo