Narrador omnisciente:
-Una vez que todos terminaron de hablar y comer algunos refrigerios, reanudaron la película:
Abuela Alma: ¿Qué está pasando?-Interrogó mientras se acercaba a sus dos nietas y miraba alrededor de Casita.
-Al ver esto, todos se tensaron instantáneamente y tenían la sensación de que no les iba a gustar lo que sucedería a continuación.
~Al escuchar y ver a su abuela, Isabela y Mirabel se sientan preocupadas~
Mirabel: Abuela, tranquila ¡Todo está...vamos a salvar el milagro, la magia...-Respondió mientras se ponía de pie junto a su hermana.
Abuela Alma: ¿De qué estás hablando? ¡Mira nuestro hogar! ¡Mira a tu hermana!-Reprocho con enojo.
Luisa: Yo creo que ella se ve hermosa- Defendió y todos los primos Madrigals estuvieron de acuerdo.
Isabela: Gracias hermana-Agradeció con una sonrisa.
-Todos los adultos, sonrieron al escuchar esto, incluida Alma, aunque pensaba que el vestido era un poco llamativo y que definitivamente necesitaba algunos toques más, le sentaba bien a Isabela en un sentido extraño. Además, su nieta se veía tan feliz haciendo el vestido, que las apariencias de externas ya no le importaban tanto como antes, con tal de ver a su nieta mayor sonriendo de una manera que no había visto hace mucho tiempo.
Mirabel: Es que…Isabela no sé sentía feliz...-Trato de explicarse.
Abuela Alma: Claro que no esta feliz. Arruinaste su propuesta-Replicó con severidad.
-Mirabel al escuchar eso, se encogió en sí misma, al mismo tiempo que agarre de Luisa se hizo más fuerte al igual que el de Antonio, el de Dolores y el de Isabela, mientras que Camilo apretaba más el agarre de la mano de su prima.
Bruno, por otro lado, había mirado a su sobrina, sus ojos se habían puesto cristalinos una vez más y vio cómo se encogía en sí misma y noto que la mirada vidriosa de sus ojos era similar a la que había visto antes, aunque no era exactamente igual.
~Isabela se vía en el fondo luciendo insegura e incomoda, se había apartado considerablemente de su hermana, mientras escuchaba como su abuela la reprendia~
Mirabel: No, no, no. ¡¡Es que yo debía arruinar su propuesta!! Y luego hicimos todo esto y la vela brilló más fuerte y las grietas...-Explicó enérgicamente.
Abuela Alma: Mirabel...-Advirtió en tono peligroso.
-Bruno reconoció el tono y la mirada que uso con Mirabel e incluso se enderezó debido a esto y tanto Julieta como Pepa se dieron cuenta de esta acción y lo abrazaron con más fuerza.
Por otro lado, los primos Madrigals, se aferraban lo más que podían a Mirabel en este punto.
Mirabel: ¡Y por eso me vi en la visión! ¡Debo salvar el milagro!-Exclamó con felicidad.
Abuela Alma: ¡Tienes que parar ya, Mirabel!-Gritó.
-Al escuchar tal grito, Mirabel se estremeció, y todo los primos se aferraron más a ella al notar está acción y Bruno hizo una mueca.
~Mirabel, tras aquel grito, inmediatamente se congelo y parecía herida~
Abuela Alma: Las grietas iniciaron contigo, Bruno se fue por culpa tuya, Luisa perdió sus poderes, Isabela está fuera de control...-Comenzo a enumerar.
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Raccionando a Encanto.
Fantasy-Casita al notar la tensión constante en la familia Madrigal y también al sentir cada vez más las grietas dentro suyo, ella toma una decisión, que es hacer que la familia mire su futuro con la esperanza de arreglar todo antes de que sea demasiado ta...
