CAPÍTULO 46 || ELLA SABE ALGO ||

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Una razón más para odiar ese mundo. Le platico a mi padre del paro cardíaco de Trina y como se encuentran emocionalmente las trillizas, están devastadas y sus padres no las ayudan.

— Es increíble como arruinaron la vida de esa joven.

¿Qué?

La vida de Trina no está arruinada...

Antes de que pueda corregirlo, Hope entra al área del comedor con un vestido cuello de tortuga y manga larga. Arrugó las cejas por su atuendo, ya que el clima de hoy es muy caluroso.

Cuando quiero decir algo, el golpe de su mejilla y su labio cortado llama mi atención alarmándome.

— ¿Todo bien? — le señaló sus heridas y mi padre aparta el periódico para examinarla y después ignorarla.

— No es nada grave.

Su respuesta no termina de convencerme, pero me quedo callada. Si Grecia estuviera aquí, talvez me diría que sucedió, pero se encuentra en Nueva York...

— Padre, quiero hablar contigo respecto a la empresa.

Una empleada de servicio le sonríe mientras le entrega el plato y Hope empieza a poner algo de fruta y su jugo de naranja.

— Dime, ¿Puedo ayudarte? — le respondo ante el silencio de nuestro padre.

Me cruzo de brazos cuando ella me mira con una ceja alzada y esa misma mirada que Louisse me daba de superioridad.

— ¿Por qué tienes que ser tan entrometida?, quiero hablar con mi padre, nunca mencioné tu nombre.

No entiendo esa faceta de Hope, antes solía ser muy amable y cariñosa conmigo. Pero, todo cambió desde el "falso compromiso" que tenía.

— Estoy hastiado de tu maldita actitud grosera y tus estupideces de "Amelia es tu favorita."

El periódico se arruga ante la fuerza de nuestro padre y Hope baja la mirada ante su tono de voz elevado.

— Déjala, padre.

— No, Amelia. — exclama — Eres su hermana mayor y debe tenerte respeto, ¿A caso no tienes modales?, ¿Qué buscas con esa actitud?

Me empiezo a tensar cuando observo que Hope se estremece ante la voz fuerte de él. Desde lejos se puede ver su miedo, ese pánico como si la hubieran golpeado...

— ¡Busco que ya no me veas como una niña tonta!, tengo 18 años y exijo trabajar en la empresa en la cual tengo acciones como ella. — termina de decir señalándome.

Sus palabras tan seguras de sí misma me hacen sonreír, le sostiene la mirada a Frank y cuando volteo a verlo...

— Deja de comportarte como una malcriada y talvez empiece a respetarte. — su risa me tensa — Siempre les he dicho que no se comparen entre ustedes, Amelia tiene todos sus estudios terminados, ¿Y tú?.

Hope se pone de pie a la defensiva, incrédula ante las palabras de nuestro padre.

— ¡Hablo 5 idiomas, estudié 3 cursos sobre negocios donde en todos salí sobresaliente, práctico ballet, vóleibol y básquetbol, sin mencionar que actualmente estudio diseño de modas!

Hope es una joven con mucho talento, desde niña siempre fue muy inteligente y mis padres las metían a deportes para que tuvieran un buen desarrollo.

— En la empresa no tienes acciones, decidí que Amelia se quedara con el 65% y antes de discutir lo hice porque ustedes habían dicho que querían algo distinto que trabajar en la empresa familiar.

TRAVIESA OBSESIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora