The Uchiha ¿Cats?

4

𝓔𝓷𝓬𝓾𝓮𝓷𝓽𝓻𝓸 𝓷𝓪𝓭𝓪 𝓮𝓼𝓹𝓮𝓻𝓪𝓭𝓸
何も期待していません

Amane se sentía agobiada.

Ser casi arrastrada por Obito, Shisui, Madara y Sarada, quienes se habían emocionado más de comprar ropa nueva, le había resultado cansado.

No entendía como Sarada teniendo solo doce años era así de rápida a la hora de crear conjuntos de ropa con solo ver a su alrededor.

Itachi le consolaba diciendo que al acabar regresarían al departamento.

Por supuesto que no fue así, fue llevabada la mansión de los Uchiha donde Indra le recibió con mala cara y una nueva discusión terminando por ser ignorado.

La visita de Ōtsutsuki Tomoe en casa de los Uchiha tomó por sorpresa a todos.

—Ōtsutsuki-san ¿A que se debe su visita? —cuestionó Obito al ver que Madara no estaba presente para hecharlo.

—Amane ¿Esta aquí?

Obito se confundió al saber que buscaba a Amane, se suponía que no se conocían entre sí.

—Depende para que le busques.

—Debo hablar con ella de manera urgente.

—¿Tomoe?

—¡Amane! Necesito hablar contigo.

La chica frunció el ceño ligeramente.

—¿Que quieres?

—Debe... Debe ser en privado.

Obito le dio una mirada a Amane, parecía seria, pero aún así siguió a Tomoe de vuelta al exterior de la casa.

Cuando se alejaron lo suficiente, Tomoe pareció a izar el entorno unos segundos.

—Amane... Kirari quiere que tu... Que vengas con nosotros, te será muy conveniente, podrás dejar a los Uchiha, no necesitas depender de ellos, además, la herencia... —se detuvo al ver que Amane alzaba una mano.

—No.

—¿Disculpa?

—No voy a volver con Kirari, menos contigo, no quiero acercarme a nadie de los Ōtsutsuki ¿Entiendes? Además, no seré alguien que solo depende de ellos, tengo mi propio empleo y puedo mantenerme a mi misma, es seguro que no me quedaré aquí mucho tiempo, una vez que se aburran de mi me iré.

—Amane, no tienes que hablar de esa forma.

—Ellos han hecho más por mí en menos de una semana de lo que tú o mis padres a lo largo de mi vida.

Tomoe bajo la mirada.

—Déjame-

—No, no aceptaré tu dinero.

—Ya veo... —dio un paso hacia Amane —¿Puedo... Puedo al menos abrazarte?

La más baja suavizó su expresión un poco, el cariño que aun le guardaba era suficiente para ceder.

Asintió con lentitud y Tomoe la abrazo sin esperar mucho, escondió su rostro en la curvatura de su cuello.

—Te quiero...

—Yo también —respondió Amane palmeando su cabeza.

Ambos se sobresaltaron al escuchar el grito que Itachi pegó.

—¡SHISUI!

El mencionado caminaba hacía ellos con Itachi detrás, el mayor parecía realmente molesto.