War of Hearts [Editando] [Tom Holland]

CAPÍTULO 30

TOM

El silencio en la casa es abrumador, cada ruido que se hace al pisar una hoja que hay en el suelo es una señal de alerta para cualquiera de los agentes que nos encontramos haciendo guardia esa noche. El sol no tarda en salir, el cielo poco a poco se llena de algunos destellos para anunciar el día, aunque nada podrá alejar la oscuridad en la que me he visto envuelto desde hace unas horas. Saludo a algunos de los agentes con los que me cruzo y me dan informes acerca de su guardia, ni siquiera puedo prestar atención a esas mínimas cosas. Lydia tose ruidosamente y hago una mueca, sabía sus intenciones con eso pero no caería. Hay un dolor que se ha instalado en mi pecho, cada vez que respiro siento como si este creciera más y más. No me creo capaz de poder controlarlo pero tengo que hacerlo, ya he aprendido a lidiar con eso, a seguir sumando culpa y dolor en mi interior. Escucho que Lydia vuelve a toser pero con más fuerza, algunos de los agentes que pasan a nuestro lado fruncen el ceño pero no hago caso, es ahí cuando ella se fastidia y se pone enfrente de mí.

— Holland, tendremos que hablar de esto tarde o temprano — dice Lydia con decisión y fastidio, me mantengo estático enfrente de ella, ni siquiera puedo moverme para huir de esa conversación — ¡Hey! Te estoy hablando, maldita sea.

La mirada de Lydia me hace recordar algo, ese enojo y reto por no obtener lo que quiere, una imagen que prefiero olvidar llega a mi cabeza, intento alejar ese recuerdo doloroso pero es imposible, no puedo hacerlo, no cuando sé que le he roto el corazón a la única persona que me ha brindado su cariño y amor de una manera tan sincera. Su mirada quedó grabada en mí, puedo recordar ese momento una y otra vez, como un maldito bucle. Las ganas de haberla detenido fueron inmensas, ella nunca sabrá que di 10 pasos apresurados para intentar detenerla pero entonces me detuve a mí mismo; no la merezco, no cuando he llegado a ese lugar con engaños y de una manera poco correcta.

— ¿Y bien? — Lydia sigue esperando por una respuesta — Comienzas a hablar o de verdad soy capaz de sacarte todo a golpes.

— No eres capaz.

— No me estés retando de esa manera, Holland, ¿por qué diablos la rechazaste? ¡Ella te gusta! — lo último lo ha dicho con fuerza y algunos agentes voltean a verla — Eres un idiota, puedes dar por perdido cualquier cosa que existiera entre ustedes, ahora ella está allá arriba con otra persona. ¡Duerme con él!

— Carajo, Lydia, ¿puedes bajar la voz?

La sostengo de la mano para que siga caminando y alejarnos de algunos agentes que se detienen para escuchar nuestra conversación. Lydia sigue maldiciéndome y lanzando preguntas que no contesto, lo único que agradezco es que no menciona el nombre de ella. Me detengo en una parte solitaria de los jardines y Lydia me ve, esperando que le diga algo.

— ¿Entonces?

— Ya te dije todo lo que debía, Lydia, no hay nada más que hablar.

— Ella te gusta, Tom, estabas dispuesto a olvidar el plan.

— El plan no se puede olvidar — conteste con enojo — Esa es la razón principal para estar aquí, lo había olvidado por completo y él me hizo recordarlo.

— Thomas, el plan se puede ir a la mierda cuando se trata de tu felicidad. Yo también busco lo mismo que tu pero eres mi hermano y si este plan sólo ocasiona que te hundas más en la miseria en la que vives, entonces no pienso seguir con esto.

— Prometimos que haríamos esto para buscar justicia, ellos no merecen lo que tienen, todo mundo debe saber qué clase de personas son — una gran rabia recorrió mi cuerpo, sentía mi corazón palpitar con fuerza — No dejaré pasar esto, ella sólo estaba siendo una distracción.