¿Por qué huiste de mí?

Capítulo 4 : Atrapar y liberar

Un gemido salió a rastras de la garganta de Gregory, el niño tratando de ponerse en una posición cómoda, los pies golpeando algo duro. Intentó levantar los brazos, lo mismo sucedió también. Sus ojos se abrieron de golpe, ojos saltando de un lugar a otro, empujando hacia atrás, no podía llegar muy lejos, empujando hacia adelante se encontró con el mismo resultado.

Una pequeña abertura se asomó a través del pequeño espacio cerrado, lo que obligó a Gregory a inclinar su cuerpo para ver a través de esa grieta, parpadeando para alejar la somnolencia que se desvanecía lentamente. Podía ver que estaba en algún tipo de habitación, pero estaba demasiado oscuro para distinguir los objetos en el fondo. Apenas podía distinguir un espejo y un tocador, pero eso era todo lo que podía ver. Intentó ver de dónde procedía esa luz, un pequeño destello atravesó la tela que obstruía las luces.

Gregory miró por unos minutos más antes de colocar sus manos cerca de la grieta, empujando con todas sus fuerzas para tratar de liberarse. Más empujones y algunos gruñidos ocasionales más tarde se había cansado de intentar salir de su espacio cerrado. Apoyando la cabeza contra la puerta, Gregory cerró los ojos con fuerza y ​​su mente llegó a conclusiones.

'Es solo un sueño. Tiene que ser un sueño, no hay manera de que Freddy pueda encontrarme tan rápido-'

"Gregory, ¿te has despertado?"

Una suave voz áspera rompió su concentración, los ojos se abrieron de par en par, las pupilas se encogieron cuando levantó la cabeza, el espacio oscuro ahora estaba iluminado por un suave resplandor azul.

"¿Eres tú, Freddy?" La voz temblaba cuando las tripas de Gregory se apretaron, medio esperando que fuera solo una pesadilla en la que estaba.

"¡Sí, pequeño  superestrella!" Freddy acababa de despertarse con algo empujando su escotilla, sus sistemas se iniciaron mientras se sentaba con cuidado, para no asustar más al niño. "Te he traído de vuelta a mi habitación verde para que descanses, ¡tenías el sueño bastante pesado cuando te recogí!"

Un movimiento empujó ligeramente a Gregory, asomándose por la rendija para ver a Freddy caminar hacia el borde de la habitación, las luces se inundaron repentinamente para que Gregory protegiera sus ojos de inmediato. Después de parpadear para adaptarse, Gregory vio que efectivamente estaban de vuelta en la habitación en la que conocieron, el temor nunca abandonó a Gregory ni una sola  vez.

Gregory tragó su saliva antes de respirar inquieto, abrazando sus rodillas contra su pecho.

"¿Puedo salir? Me gusta estar afuera por favor." preguntó Gregory, pensando que el oso no exageraría al mantenerlo adentro.

"No."

"¿Eh?"

"Me temo que no puedo permitirte salir, eres demasiado frágil para caminar, no puedo permitir que mi cría se lastime otra vez ". El repentino tono frío chocó con la suave comodidad que el animatrónico habló antes. El pequeño espacio de repente se volvió más estrecho de lo que era cuando Freddy se inclinó ligeramente hacia adelante, abrazando sus costados como para abrazar al niño que llevaba dentro.

"Te prometí que no te haría daño. Que sería tu amigo en este lugar. Tengo la intención de cumplir esa promesa que te hice, superestrella". Agarrándose con más fuerza antes de erguirse, permitiéndole a Gregory ganar algo de espacio para respirar. Los ojos brillantes se nublaron cuando pensó en una situación de vida perfecta para que Gregory se quedara, ya que no podía mantenerlo dentro de su escotilla todo el tiempo, ¿tal vez en algún lugar de la estación de primeros auxilios?

Con la idea de un escondite adecuado en mente, Freddy presionó el botón para abrir la puerta, el acero se deslizó hacia la derecha para que pasara el animatrónico. Gregory, por otro lado, comenzó a empujar contra la escotilla, gruñendo mientras intentaba forzarla aunque sea un poco.