Todo lo que no eres [Completa✓] #1 Bilogía Todo

Capitulo 5

MIKA

- No vas a dejarme. - Hablaba el hombre - Ya te lo dije muchas veces.

- Estas mal de la cabeza, entre nosotros no hubo nada y ni lo habrá, yo solo quise ser amable contigo, así que solo vete de mi casa.

- No puedes pedirme eso. Yo te amo.

-Eso no es amor - Grita la mujer - A la persona que dices amar no la dañas, no la rompes, no la humillas. Tu no sabes amar, ni siquiera lo amas a él.

- No quería hacerte daño, ni a él, ni a ti, déjame estar a tu lado por favor.

- No somos nada, yo solo fui amable haciendo mi trabajo y tú te obsesionaste conmigo, solo vete de mi casa, ya no más por favor. Déjame ser feliz y déjalo ser feliz a él.

La mujer se giró para dejar al hombre atrás pero este se llevó la mano al bolsillo de atrás.

- No, si no estás a mi lado no te dejare estar al lado de ellos. - Le decía de forma siniestra mientras la mujer se giró para mirarlo.

- Baja eso. Por favor - Dijo la mujer asustada detallando el arma que sostenía el hombre.

- No, las cosas son como yo quiero. - Tomaba firme el arma apuntandole en el pecho.

- Por favor. Ellos están aquí. No lo hagas - La mujer trato de correr, pero el hombre fue tras ella sujetándola del cabello.

- Me lo quitaras, estarás feliz con él y con ellos. Harás lo mismo que ella hizo y no puedo permitirlo. - Le gritaba el hombre mientras forcejeaban entre los dos, se escucho algo caer al piso y de pronto el sonido de un disparo retumbó en la habitación.

Desperté con un grito, mi rostro se encontraba húmedo a causa de las lágrimas y sentía el sudor frío cayendo en mi frente y espalda.

La habitación se mantenía oscura y mi corazón latía rápidamente.

- Pequeña ¿Qué sucede? - Mi padre entro a mi habitación, seguía con su traje sin su corbata y con el cabello algo alborotado, llegó a mi sitio tomando asiento en mi cama. - ¿Por qué gritabas?

- Yo.... la mujer... Le dispararon - No podía ni siquiera responder a la pregunta y respiraba con dificultad mientras mi  corazón seguia amenazando con salirse de mi pecho.

- Tranquila, respira - Mi padre me abrazo, su cuerpo se sentía frío y mi nariz se inundó de su loción, se mantuvo así hasta que mi respiración se controló.

- Tuve otra pesadilla - Le decía mientras pasaba sus manos por mi rostro para limpiar las lágrimas.

En algunas ocasiones tenia pesadillas sobre cosas mi infancia que no recordaba, la mayoría eran sueños siendo yo una niña, estando con mi padre, jugando o cosas así, hace mucho ya no me pasaba esto.

Esta fue horrible. Se sintió tan real, como si yo fuera la que estuviera en esa habitación viendo todo.

- ¿Quieres hablar sobre ello? - Me pregunto soltandome.

- No. - Dije negando con la cabeza también.

- Esta bien, tranquila, solo fue una pesadilla - Volvió abrazarme y está vez fue más fuerte.

- ¿Dónde estabas? - Le pregunte después de un rato y sentí que su cuerpo se tenso un poco.

- Tuve mucho trabajo en el despacho, estoy en un caso nuevo - Me dijo con algo de nerviosismo y asentí con la cabeza.