Niccolo x Sasha |SUS INICIOS| [FANFIC] Attack On Titan ©Bauklotzen

16. Tu Nombre

Al transcurrir de los días, tal como prometieron, ambos chicos solían encontrarse a la hora del desayuno, justo antes del amanecer.

Niccolo cada día cocinó algo distinto para Sasha.

Ella luchó por levantarse, siempre vistiéndose en medio de la oscuridad para no despertar a Mikasa. Fue tan sólo uno u otro día que se quedó dormida. Situación que tan sólo hacía reír a Niccolo.

-Tuviste un profundo sueño de belleza anoche?

-Oye! estaba cansada, si? Hange anda con los pelos de punta y todos nos volvemos locos.

Ambos amantes se veían una vez al día y tan sólo en la mañana. Eso es lo único que tienen a su alcance para poder mantenerse cerca.

No obstante, aquella amanecida fue distinta porque Niccolo tenía en mente algo muy especial para ese día.

-¿Qué es todo esto? -Preguntó curiosa.

-Provisiones.

-Provisiones?

-Nos vamos.

-Nos vamos?!

-Aun estás dormida? repites todo lo que digo.

-A dónde... ¿nos vamos?

-Sólo sígueme.

La castaña guardó silencio, extrañada.

Aún estaba oscuro y todo el mundo dormido, asique aprovecharon el instante y ambos emprendieron su viaje por las vacías calles.

No hablaron de nada en particular, sólo temas triviales como de costumbre.

Caminaron y caminaron. La curiosidad de Sasha aumentaba, hasta que llegaron a una carroza aparcada en la calle.

-Señor Nick?

-Sí.

-Perfecto. Puede subir.

Sasha quedó estupefacta ante aquello. El chico tenía todo preparado, sin embargo ahora se preguntaba, ¿qué era eso que tenía preparado?

-Cuando... pagaste esto?

-Lo contacté hace unos días.

-Señor Nick? -Cuestionó Sasha divertida.

-No queremos problemas, o si?

Ambos ingresaron a la carroza y se mantuvieron en silencio, la castaña cerró los ojos por un momento, era muy temprano por la mañana y tenía sueño. Sintió su cuerpo descender poco a poco, y luego, cuando la carroza se detuvo, despertó. Reincorporandose del hombro del chico.

-¿Me dormí?

-Si, y ya llegamos.

Niccolo bajó tomando su mochila, esperando que la chica también bajase.

-Una soldado de día libre eh? Pudo buscar un vestido en su closet, señorita. -Bromeó el transportista.

Lo que no sabía el señor, es que Sasha no estaba de día libre.

-Lo olvidó, es la costumbre. -Respondió Niccolo por ella, dándole una pequeña bolsa con monedas al hombre.

-Vuelvo a la hora acordada, señor Nick?

-Sí. No hay cambio de planes, todo resultó bien.

-Perfecto. Disfrute la tarde con su novia. -Se despidió el señor, yéndose.

El chico tan sólo asintió.

Finalmente cuando el rubio se dirigió a la castaña vio cómo su rostro se iluminaba.