Capitulo 89

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Personas con el mismo uniforme, para ser preciso era un tono azul bastante aburrido pero que se me veía bien de todas maneras.

Eran jaulas individuales para cada uno de los animales que aquí estaban. Claro, para otro como cierto ladrón no tenía tanta suerte, dicen que cada quien paga sus pecados tarde o temprano.

La hora de comer, es la primera vez que lo haría, el guardia abre las rejas y sigo a los demás animales a la cafetería. Parecian zombies, ya sabían que hacer, tomar la bandeja esperar en la fila para que el cocinero de mal aspecto les sirviera la comida que puedo imaginar maldijo antes de ofrecerla. Sabía que no pasaría demasiado para que fuera parte de la rutina.

Hombres tatuados, de aspecto enemistoso, es como hacer amigos en primaria, solo que no tenía el interés, con cualquier lugar vacío me bastaba..

Uno de los hombres que allí estaban al verlo golpea el pecho de su amigo para que se percate antes de seguirle.

-Asi que crowns, ¿he?

-Bernardo crowns para ser más preciso —Dice sin apartar la vista de su comida

-Asi que señorito crowns, que le trajo por aquí —se sienta junto a él encima de la mesa

Rueda los ojos

-¿Y bien?

-No entiendo, ¿cuánto llevas aquí?

-Diez años

-Diez años, largo tiempo y en todo ese suceso..¿no se te ocurrieron mejores preguntas para intimidar?, porque digo, tenías bastante tiempo para pensar

Algunos rien..

-Ah ya veo, no quieres ser la perr* de nadie —Toma su bandeja para tirarla

-La verdad me hiciste un favor

-No te funciona

-Que, ¿el no querer ser intimidado?, por que querría —Lo observa

-Este no es tu mundo perfecto. Que creía señor, ¿que tendría criados aquí?, ¿qué el dinero podía hacer algo?, lo lamento, eso aquí no sirve

-Ni en ningún otro lado

-Asi que secuestraste a tu ex mujer, bueno, a una pobre muchacha que engañaste para tus fines. Me pregunto, ¿querías algo más que acostarte con ella?

Sonrie arrogante

-Pero sabes, para que ella no decidiera denuciarte desde el tiempo que estuvieron juntos tuviste que hacer algo. Me pregunto qué, a menos que ella le guste eso, tal vez es igual de perr* que todas..

Sin esperar más tiempo se levanta para empujarlo logrando que cayera de la mesa.

Pero en consecuencia las personas que estaban con él lo toman y apegan de frente a la mesa.

-No debiste hacerlo

-Claro, me sentaría a oír las estupideces que hablas

-¿Te afectó?, no seas cínico —Le golpea haciéndole voltear el rostro a un lado.

-¿no actúas sin tus guardaespaldas?, ¿no puedes solo? —Dice trarando de liberarse de su agarre

-Podria pero hay que aprovechar la compañía ya que se tiene

Se iba a acercar una vez más pero Bernardo le patea el abdomen haciéndole inclinarse sin aire..

-¡Que pasa aquí! —El guardia al fin se percata

Los demás se dispersan rápidamente

-¡Otra vez Josep!

-..Él comenzó —Dice tratando de hablar con normalidad

Cenizas del ayerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora