Cuidando a Harry

Capítulo 9

La mañana del 5 de junio llegó demasiado temprano para Harry Potter. No había pegado un ojo, su mente estaba demasiado ocupada repasando los eventos de los últimos cinco días. Había regresado a los Dursley de la escuela solo para ser brutalmente atacado y dejado en el sótano de la casa que se creía muerto.

Luego fue rescatado milagrosamente por Bellatrix Black. Este primo de su padrino Sirius Black lo había estado cuidando desde su tercer año en Hogwarts. No fue hasta el final de su cuarto año que descubrió que ella lo había visitado con regularidad y lo había consolado durante sus momentos de mayor necesidad. Ella lo abrazaría y le cantaría suavemente. El aroma de sándalo y especias que ahora sabía que era ella se había convertido en un bálsamo para su alma.

Ella había sido una presencia casi constante en su vida durante su quinto año. Hubo muchas cartas enviadas entre los dos y muchas visitas nocturnas donde hablarían durante horas escondidos detrás de las cortinas de su cama con dosel. Se agregó un hechizo silenciador para que no fueran escuchados. Incluso hubo algunas noches en las que ella se acurrucaría junto a él y lo abrazaría con fuerza cuando sus pesadillas la llamaban.

No estaba seguro de cuándo sucedió o cómo, pero comenzó a enamorarse de ella y ahora, teniendo acceso a los recuerdos de Bella, sabía que ella había comenzado a enamorarse de él casi al mismo tiempo. Aunque no se dieron cuenta en ese momento, la semilla había sido plantada y creció y creció.

Harry sonrió con amor hacia la cabeza de cabello ondulado de ébano que descansaba sobre su pecho, su brazo izquierdo estaba cruzado sobre su torso y podía escuchar y sentir sus profundas y suaves respiraciones mientras dormía. No habían ido más allá de los abrazos y besos y un poco de exploración. Pero todavía estaban aprendiendo a sentirse cómodos con la nueva relación y querían tomárselo con calma.

Sin embargo, rápidamente se dieron cuenta de que su vínculo todavía estaba tratando de estabilizarse y cuando intentaron separarse durante un período prolongado de tiempo, sintieron una debilidad repentina en todo el cuerpo y náuseas en el estómago. El sentimiento se desvanecería rápidamente tan pronto como se tocaran. Entonces decidieron quedarse en la misma habitación y compartir la misma cama. No es que Harry o Bella se quejaron del asunto.

El vínculo fue otro asunto que le dio que pensar. Bella había arriesgado literalmente su propia vida para salvar la de él. Había sido testigo de su promesa a través de sus recuerdos. Podía sentir el beso que ella le había dado antes del ritual y sintió el amor abrumador que había detrás de él.

El corazón de Harry se apretó y las lágrimas amenazaron con caer de sus ojos. Nunca había conocido el amor, en realidad no. Sabía que se preocupaba por sus amigos y sabía que también amaba a Sirius y tal vez incluso a Remus como algo parecido al amor de un hijo por un padre. Pero el nivel de amor que sentía por Bella y el nivel que ella sentía por él estaba en una escala completamente diferente.

Aunque era joven e inexperto en asuntos del corazón, sabía con absoluta certeza que quería pasar el resto de su vida con Bella. Ella lo hizo sentir completo; ella era esa parte perdida de sí mismo que él no se había dado cuenta de que había estado perdiendo. Y ahora que se sentía completo, lucharía por mantenerlo así.