— ¡¿Qué tú hiciste qué a quién y por qué o dónde cómo cuándo pensaste decir eso?! –gritó ganándose malas miradas por parte de quienes estaban en la biblioteca–. Ay.. perdón.
— ¡Shhh! –suspiró frustrado–. Me dijo que le gusto, o sea ¿qué carajos?. Es mi amigo, ¿cómo puedo gustarle?.
— Gustando, duh.. –habló vago.
Habían pasado las primeras horas y ya estaban en almuerzo. Durante las clases a penas y Sunoo pudo concentrarse.
— Hablo en serio, Riki-ssi. –se quejó–. Es cómo si tú me dijeras que te gusto, sería raro.
— ¿R-Raro? ¿Por qué?.
— ¿"Por qué"? Eres como un hermanito es obvio que me sentiría raro, y sería raro.
— ¿Por qué raro?.
— ¡Vamos, Riki-san! –hizo una mueca obvia–. Eres hombre.
— ¿Y?.
— Yo soy hombre.
— ¿Y?.
— ¿No te basta eso para saber que ya es raro?.
– Sigo sin ver el problema. –tomó un pequeño sorbo a su bebida.
— Es raro con solo imaginar eso, ¡me siento raro con sólo imaginar!. –suspiró.
— Sun-ie, ¿eres gay?. –acomodó su silla.
— ¿Pero que carajos dices? Obvio que...no. –miró a otro lado indeciso.
— Dudaste, eres gay. –siguió bebiendo.
— ¡Que no lo soy!.
— Sunoo, yo soy gay. –el contrario se atoró con su saliva y lo miró sorprendido–. Y me gustas.
— ¿Qué?. –abrió sus ojos aún más por lo sorprendido que estaba.
— Okay, fue incómodo. –volvió de tomar un sorbo de su bebida.
Fue una declaración inesperada en el momento inesperado.
— Sun-ie, ¿me dirás que ocurrió ayer? Ya fui sincero contigo, ahora hazlo tú conmigo. No te estoy diciendo esto para que me aceptes o algo parecido porque sé la respuesta sólo dime qué pasó, si tú no hablas no puedo ayudarte.
Negó con la cabeza el japonés mientras hacia que el pelirosa botara un leve suspiro pesado. Sentía nervios al recordar, sentía presión, sentía dolor.
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Habían terminado ya las dos horas en las cuales hacían las lecciones. Luego de la salida Heeseung fue a dejar en casa al pelirosa quien tuvo que llamar minutos antes a su 'noona' –como ya habían quedado– que no dudó en ayudar a este.
Como típica escena de un drama el mayor se acercó a este y le dejó un casto beso en labios mientras el contrario quedaba perplejo. Cuando pudo reaccionar ante esto Heeseung ya se había ido con una sonrisa en su rostro dejando a un pelirosa aturdido y muy confundido.
