Eunwoo se ganó las miradas de sus amigos quienes lo miraron raro.

─¡¿Qué?!, no digo mentiras, está bueno ─se encoge de hombros.

─Como sea. Solo espero que a Jk no le revienten la última vena que tiene en la cabeza, estoy seguro de que ver eso no le gustará.

Volvió a repetir Jackson.

─¿Y qué tiene de malo que Pequitas esté con otro? No es como que fuera de su propiedad.

Dijo, Jaehyung.

─Si, pero el menso de Jungkook le gusta, lo puedo ver en sus ojos y créanme, no es solo por follarlo.

─¿Cómo estás tan seguro? ─cuestiona, Young-Jae.

─Pues, estos ojos que todo lo miran, saben que a JK le gusta mucho Jimin. Si no fuera eso, créanme que no se hubiera molestado en hacer todo ese show de tutorías. Si él quiere un polvo, lo tiene y con park se esfuerza mucho.

Todos se miran entre sí con esa duda en sus cabezas. Si bien Jungkook siempre conseguía lo que quería, nadie le decía un no y menos Jimin. ¿Por qué hacía todo eso solo por un polvo?

Las respuestas estaban claras, a Jungkook le gusta Jimin, pero el tonto no se daba cuenta.

Se marcharon de ahí a su guarida, mientras tanto alguien no la pasaba del todo bien.

Jungkook estaba molesto con su madre, porque ella no fue capaz de llamarlo para saber cómo estaba, solo un miserable mensaje de «Espero que estés bien» se sentía como la mierda, si bien siempre le dio problemas a su madre desde la muerte de su padre, no era para que lo ignorara y menos con algo tan delicado como un atentado en su contra.

Le hacía falta su padre, él sí sabía entenderlo más que nadie en el mundo. Cada día que pasaba lo extrañaba más y el recuerdo de cómo lo miro morir aún estaba presente en su cabeza. Le dolía porque era la única persona que lo comprendía, lo dejó solo. Alejó aquellos pensamientos y fue con Bam.

Le mandaron las fotografías a Jungkook, quien le estaba dando de comer y cepillado los dientes a Bam. Su tía no estaba porque fue a ver casas y su primero Soobin fue a su primer día de secundaria. De pronto su móvil suena con los mensajes de Jackson en la pantalla, los abrió y para su sorpresa eran fotos de Jimin con otro chico.

─¿Pero qué mierda?

El rubio parecía feliz con aquel chico, no sabía quién rayos era, pero sentía mucha molestia ahora mismo «Por no decir celos» apagó el móvil y marcó el número de Jimin varias veces, pero no le contestaba.

Estaba furioso, más bien sentía celos aunque él no le reconocía. Ni siquiera sabía el porqué tanto enojo, total Jimin no era nada de él y no significaba absolutamente nada; sin embargo sentía el fuego recorrer su cuerpo, dejó a Bam y entró a su casa, tomó la botella de Jack Daniels y empezó a beber la como loco.

Esto se tornaba cada vez peor, estaba en una de sus crisis y cuando eso pasaba terminaba con todo lo que podía o se le atravesaba. Se dejó cegar por el dolor y el recuerdo de su padre, su madre ignorándolo y ahora Jimin con otro. ¿Sería de esta forma que el destino le castigaba?, ¿le quitaría las personas que amaba siempre?

Volvió a empinarse la botella hasta casi dejar la vacía, lloraba en silencio, maldecía y se ahogaba en su dolor. Ni él mismo tenía ganas de seguir viviendo.


⫘⫘⫘⫘⫘⫘



Jackson corría por todo el campus, la clases terminaron y la mayoría de los estudiantes ya se habían ido, y él solo quería encontrar a Jimin. Este venía riendo con el chico nuevo, ni siquiera lo pensó dos veces y le gritó.

𝗠𝗶 𝗗𝘂𝗹𝗰𝗲 𝗖𝗿𝗶𝗺𝗶𝗻𝗮𝗹 ✗𝗸.𝗺Donde viven las historias. Descúbrelo ahora