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21: Coronación. El látigo.

El emperador no estaba realmente muerto. Eso fue obvio después de un breve momento de pánico, cuando Mo Ting le explicó todo.

Zhang Liu ya estaba cansado de ser el solitario emperador que nadie conocía en realidad. Ver a Liu Xiuyan siendo tan feliz junto a Mo Ting le recordó que su vida podía llegar a ser algo más que la de un triste anciano obsesionado con su primer amor. Si bien se sentía extraño cuando miraba el rostro tan parecido a Liu Kang, Zhang Liu se dió cuenta de que Liu Kang le habría abofeteado durante horas si viera el estado miserable en el que se mantuvo por muchos años. Por eso había decidido que le daría una segunda oportunidad al amor. Pero para eso tenía que dejar atrás su palacio y trono.

El emperador había conspirado con sus familiares para fingir que había muerto, dejando el título de emperador en manos de su única heredero, Mo Yang. Era un cargo muy importante que de repente había sido dejado en manos de un príncipe, pero nadie se atrevería a cuestionar su reclamo al trono una vez iniciara la coronación.

Verán, el Imperio no era la China Antigua. Había similitudes, pero Liu Xiuyan sabía que eran dos universos muy diferentes. Cuando un emperador moría, el duelo se hacía después de coronar a un gobernante. Por eso Mo Yang estaba siendo coronado ese mismo día, a solo unas horas desde que se anunció la muerte del emperador. Los príncipes, ahora pasarían a ser príncipes imperiales y heredero formalmente, pues su padre sería el emperador del imperio de una vez por todas.

Liu Xiuyan estaba nervioso. No solo debía soportar todo el evento mientras su cadera y parte trasera dolían, sino que también estaba bajo el escrutinio de todos debido a una declaración muy impulsiva que hizo Mo Ting cuando salieron de su recámara. A veces Liu Xiuyan quería matarlo por ser tan directo, aunque era un aspecto positivo en su mayoría.

-Liu Xiuyan será mi esposa. Ya consumamos nuestro amor- anunció el principito cuando toda la familia estuvo reunida en uno de los salones.

A su declaración siguieron miradas incrédulas de los gemelos, una sonrisa de Shen Lian y la típica expresión estoica de Mo Yang. Liu Xiuyan salió de la habitación en ese momento, molesto con Mo Ting por haber compartido su intimidad.

Su enojo duró aproximadamente treinta minutos, ya que el principito utilizó sus muy convincentes medios de persuasión para borrar su molestia. Y por eso el dolor de Liu Xiuyan se duplicó.

La ceremonia de coronación era bastante sencilla en teoría. Liu Xiuyan la había aprendido hace poco, cuando el consejero Mu le entregó libros sobre todas las ceremonias del Imperio. Liu Xiuyan no entendió mucho al principio, pero ahora supuso que el consejero quería prepararlo para una situación igual a esa.

La coronación iniciaba tan pronto como toda la familia presentaba sus respetos al fallecido emperador. Liu Xiuyan no participaba en aquella parte porque no pertenecía a la familia oficialmente. Así que esperó durante quince minutos hasta que el principito fue a buscarlo y le dijo que ya pasarían a la segunda etapa de la tradición. En esa sí debía participar, no importaba el hecho de que fuera un simple invitado en el palacio imperial.

Liu Xiuyan iba junto a Mo Ting, mientras el salón del trono era arreglado por los sirvientes del palacio. El trono nunca cambiaba sin importar quién era el gobernante, pero las túnicas del emperador eran confeccionadas especialmente para cada príncipe que ascendía al trono. Las de Mo Yang serían rojas ya que ese era su color estándar. El guerrero escarlata no usaba ropas que no fueran de ese tono.

Primero, Mo Yang debía pedir la aprobación de toda su familia, arrodillándose ante cada uno de ellos para demostrar respeto a la familia. Para Liu Xiuyan fue demasiado incómodo que el principe hiciera eso, pero eran las tradiciones del Imperio. Mo Yang no mostró ni una sola emoción a medida que tomaba la posición frente a su familia. Se arrodilló sin expresión, una y otra vez hasta abarcar toda su familia.