Amor a Ciegas [Toph Beifong x Male Reader]

LA BÚSQUEDA [3/3]

Zuko se plantó frente a Azula, no iba a permitir que su hermana dañara a ese tierno par de hermanos, Zuko redireccionó el rayo hacia arriba.

Zuko: ¿Lo olvidaste, Azula? Sé cómo redireccionar tus rayos.

Sokka: Woa, creo que debería tenerte miedo otra vez.

Moroha: ¡Tienes que prestarle más atención a tu hermana loca! ¡Casi rostiza a Misu y a Rafa!

Zuko empezó a caminar hacia Azula.

Zuko: Moroha tiene razón, ¡Misu y Rafa no tienen nada que ver con nuestra madre! ¿Cómo pudiste pensar--

Azula: ¡PERO ESO ES EXACTAMENTE LO QUE ELLA QUIERE QUE CREAS! ZUZU, ¡¿CÓMO PUEDES SER TAN INGENUO?!

Zuko: Tienes razón. He sido ingenuo.

Zuko se quedó mirando a Moroha, Katara, Sokka y y/n.

Zuko: ATRÁPENLA.

Katara preparó su agua, Moroha su espada, Sokka su bumerang y y/n hizo unos látigos de fuego.

Katara: ¡Con gusto!

Moroha: ¡Llevaba HORAS esperando a que dijeras eso!

Sokka: ¡Ya era hora!

y/n: Hora de volver al instituto, Azuloca.

Sokka: JAJA, esa estuvo buena, hermano, tendré que recordarla.

Sokka le lanzó su bumerang a Azula, ella empezó a lanzarle fuego.

Misu: ¡No, no hagan esto! ¡El avatar está tratando de traer al espíritu aquí!

Katara usó su agua para congelarle un pie a Azula, Sokka recogió su bumerang y Moroha la iba a golpear con su espada.

Misu: ¡No deben causar tanto alboroto!

Azula: ¡Oof!

Aang: Tiene razón. Basta.

Aang había terminado de meditar, se puso de pie frente a los chicos.

Sokka: ¡Gah!

Katara: ¡Aang, volviste!

Sokka: ¡Wew! ¡Sólo eras tú, Aang! ¡Este bosque es tan espeluznante que casi esperaba ver otra cara espeluznante!

Moroha: Claro claro, sólo es una excusa para no aceptar que eres un cóbarde llorón.

Sokka: ¡Yo no soy un cobarde llorón!

Aang: Oh, Sokka ¿Te refieres a esas?

Unos rostros extraños empezaron a flotar en la laguna.

Sokka: ¡GAH!

y/n y Moroha se burlaban de Sokka imitandolo.

y/n: "¡Yo noy soy un cobarde lloron!"

Moroha hizo una mueca.

y/n: "¡Gah, que miedo, mami Katara, ven a ayudarme!"

y/n y Moroha se reían a carcajadas.

Aang: ¡Escuchen a Misu! ¡No más peleas! Éstamos a punto de tener un visitante.

Más rostros empezaron a flotar en la laguna, de repente, algo apareció de ella, era un espíritu gigante.