Devilish | kv

Capítulo uno.

─ ¿Entonces, quién eres, qué necesitas? ─ pregunta por vez que se abraza a sí mismo con fuerza cuando el puntero comienza a moverse otra vez.

La luz de la lámpara es tan baja en ese momento que no puede percibir nada con claridad, así que se acerca un poco más y en la penumbra puede leer lo que aquel ser le dice por medio del tablero "Busco y deseo algo", fue su respuesta final.

─ ¿Qué quieres y deseas? ─ era increíble para él lo que estaba ocurriendo, sentía terror pero nada comparado con la inquietud que ahora reinaba.

El viento regresa de a poco haciendo danzar su cabellera castaña, y está tan sumido en la tabla a la espera de una respuesta, que el sonido fuerte de la puerta principal de la casa siendo azotada inunda el ambiente y lo hace saltar en su lugar. Con rapidez toma la tabla y la empuja debajo de la cama, mientras coloca el vestido bajo sus sábanas después de escuchar a su padre gritar y subir las escaleras a zancadas.

Lo único que puede percibir en la oscuridad de su habitación es la sombra de su padre aparecer por el marco de la puerta y acercarse a él para con su puño cerrado, lanzar un golpe hacia su rostro, acción que provoca que su cuerpo caiga sobre la cama, y al llevar una de sus manos a su boca se da cuenta que su labio se ha roto, y no puede hacer nada, solo recibe los golpes duros de su padre mientras éste le brama y lo maldice; y Taehyung solo puede percibir el olor a cigarrillo, marihuana y alcohol mezclado entre sí y, es asqueroso.

─ ¡Te vieron otra vez, jodido anormal! ─ Un golpe más. ─ ¡Con el hijo marica de los Jung! ─ su ira está siendo liberada con cada golpe y cada palabra hacia su propia sangre. ─ ¡Eres un asqueroso enfermo! ¡Yo no te crié así, no te eduqué para que terminaras siendo un repugnante homosexual que gusta de abrir las piernas para que lo cojan!

Debido a cada golpe y ataque hacia su persona, dejó de sentir el dolor, incluso aquel que le apretaba y hacía añicos su corazón. Y los golpes que recibió cesaron una vez que el hombre se cansó, dejando a su hijo sobre la cama en posición fetal con su cuerpo totalmente adolorido y sollozos débiles inundando la habitación.

─ No vas a salir de aquí hasta que hayas aprendido la lección. Mientras tanto, espero Kim Taehyung, que seas perdonado por cada uno de los pecados que has cometido contra la naturaleza, y que no recibas el mismo castigo que tu madre por apoyar tus gustos enfermos y asquerosos.

Y al finalizar, cierra la puerta con fuerza tras de sí y coloca el pestillo de esta, mientras Taehyung aún en su cama, se abraza con fuerza al vestido de su madre tratando de calmar sus sollozos exasperados, preguntándose cuándo todo va a terminar, pues su vida dejó de cobrar sentido cuando la única persona que lo apoyó, amó y cuidó hasta el último día de su vida partió de este mundo, pues ella fue su único motivo por el cual la vida no le parecía tan mala y cruel.

Ella, quien lo arropaba por las noches cuando de niño lloraba al temerle a la oscuridad, la que con sus palabras de amor lo hacía sentir bien cada que volvía del colegio llorando después de ser insultado por sus compañeros por ser "el rarito afeminado". Incluso, la que le abrazaba fuertemente contra su pecho y le decía que no le prestara más atención a los rumores que corrían por la preparatoria sobre él y su vida sexual con otros chicos, rumores falsos que ocasionaron golpes proporcionados por su padre, golpes que finalmente terminaban siendo para su madre cuando ella le defendía. Kim Go Eun, siempre fue su ángel que lo protegió contra todo.

Y hoy, a seis meses de su muerte, su corazón seguía doliendo al rememorar ese fatídico día en el que después de una exhaustiva búsqueda por su paradero, terminaron encontrando el cuerpo de su madre destazado dentro de una bolsa plástica a las afueras de Daegu, se hicieron las pruebas pertinentes por algunos meses, pero al no encontrar algún indicio o prueba fehaciente, su caso fue uno más que quedó en el olvido.

─ Sólo deseo saber quién te hizo esto mamá... Deseo tanto que paguen por lo que te hicieron. ─ se aferró un poco más al vestido mientras lágrimas densas brotaban de sus lindos ojos azules. ─ No descansaré hasta conseguirlo, haré lo que sea necesario, te lo juro, incluso daría mi alma al diablo si fuese posible solo por saber la verdad.

Sin embargo, Taehyung no tenía ni idea de lo que aquellas palabras ocasionarían pues, en aquella habitación en penumbras no solo se encontraba él, sino también un ser que no podía catalogarse como humano, aquel causante de que el puntero comenzara a deslizarse con rapidez sobre el tablero teñido de su propia sangre, deletreando la respuesta a la antigua pregunta del chico, la cual finalmente fue...

"Te deseo a ti, Kim Taehyung".