Capítulo 55 ─ La defensa del muro de hierro

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Finalmente estamos cerca del final de este arco, es hora de que las cosas se calienten y demasiado!!!

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Calígula no podía comprender lo que pasó.

Razel lo había mandado a volar varios metros hacia atrás.

Era la primera vez que veía esto.

Era la primera vez que experimentaba algo como esto,

No le gustó.

Calígula estaba tan furioso porque un ser inferior como Razel lo golpeó.

Ni siquiera olía a un animal que valiera la pena de enfrentar.

─ ¡Roaaaaaaaaah!

Con su rugido, los monstruos que estaban a sus espaldas parecían acatar una orden, y esa era...

"¡Mátenlo!"

Los primeros en correr directo a Razel fueron las hienas de la pradera, cinco de ellas se abalanzaron contra él.

Pero para Razel ellos eran lentos.

Solo retrocedió un poco y las hienas se estrellaron contra el suelo.

Las propias hienas no comprendieron lo que pasó.

Entonces Razel tronó su cuello y luego...

─Son realmente irritantes.

Movió su mano como si estuviera espantando a una mosca. Las cabezas de las hienas rodaron rápidamente.

Razel envió un poco de electricidad a sus manos.

La energía eléctrica en sus uñas convirtió sus dedos en pequeñas cuchillas afiladas.

Razel caminó sobre el cadáver de las hienas viendo como los goblin campeones se le acercaban con sus espadas fuera.

Lo atacaron de diferentes lados para que no tuviera escapatoria.

Justo unos segundos después de entrar en contacto con él.

Una luz azul brilló con intensidad y la docena de goblins campeones que lo atacaron fue repelida al instante.

Sangre de color morado salía de sus bocas, ojos, cráneos y nariz.

Habían sido golpeados a gran velocidad.

Razel caminaba con tranquilidad y poco a poco su velocidad aumentaba.

Los monstruos gritaron mientras corrían directo a él.

Ratas gigantes, jabalíes infernales, osos rojos, orcos, todos los monstruos se acercaban.

El más rápido de todos era un Hecatónquiro que corría con diversas espadas largas y pesadas.

Se acercó a Razel, él desapareció.

Pese a tener 50 cabezas, no sabía dónde estaba.

Pero luego Razel cayó del cielo y usó su pie como un misil. Parecía esos súper héroes similares a los enmascarados que daban en televisión.

Al caer, se estrelló tan fuerte en el centro del monstruo que lo partió por la mitad.

Los demás monstruos se quedaron asombrados.

Los goblin chamanes al verlo sacudirse la sangre verde que cayó en su cuerpo, trataron de formar un súper circulo mágico.

Pero Razel no se los permitió.

Reencarnado en un juego Otome como el personaje feo del fondo (1era Temporada)Where stories live. Discover now