Secuestrada por Zeref (saga fairy tail)

Capítulo 31

Me fue bastante inesperado estar rodeada por aquellos brazos, los cuales me recogían en forma de abrazo, un fuerte y nostálgico abrazo. ¿Cómo era posible que me viese? No me lo replanteé más y empecé a llorar en su pecho. Por fin estaba de nuevo envuelta por uno de los míos.

--Gray, te eché de menos.-- dije entre sollozos.

--Yo también te eché mucho de menos.-- me respondió abrazándome aún más fuerte.

--¿Gray?¿Qué estás haciendo ahí solo?-- dijo Lucy inesperadamente.

--Se siente tan solo que está abrazando el aire.-- dijo Natsu riéndose.

Pero Gray no dijo nada, no le respondió, me agarró y me llevó lejos. Dejó bastante extrañados a Erza, Natsu y a Lucy ya que no respondió a la burla de Natsu, la cual tanto me dolió debido a que significaba que era verdad que no me podían ver.

Una vez en un solitario callejón, Gray por fin me soltó. 

--¿Por qué desapareciste? ¿Por qué no mantuviste contacto con nosotros? ¿Y por qué demonios soy el único que te recuerda?-- dijo alzando la voz en esta última pregunta.

--Es una historia complicada. Pero... gracias por acordarte de mi.-- dije con una sonrisa mientras aún sollozaba, feliz de no haber sido olvidada por todos.

Gray me miraba atentamente, sorprendido ante mis palabra.

--¿Por qué nadie te recuerda? Réspondeme.--dijo serio.

--Hoy no puedo, necesito irme.-- dije apresurada, recordando que Zeref podría estar buscándome.

Le di un suave beso en la mejilla, aún con mis lágrimas y le di la espalda para irme a otro lugar.

--¿Te raptó Zeref no? Te ayudaré.

--¡No hagas nada!-- le grité.-- si nos ves, haz como que no existo, como si su hechizo te hubiera afectado.-- me dolió decirle eso, pero era necesario por su bien.

Cuando me fui, Gray estaba quieto. Pronunció unas palabras que no llegué a escuchar pero seguí mi camino, en busca de Zeref y Katja.

Caminé apresurada en busca de alguien conocido. Tras algunos pesados minutos en los que intentaba desprenderme de las lágrimas que ocultaban mi rostro, encontré a Katja seguida de un preocupado Zeref. Cuando caí en el campo de visión de Zeref, este me abrazó fuertemente, como si hubiera pasado mucho tiempo desde la última vez que me vio.

--No te vuelvas a perder.-- dijo apresándome junto a él.

--Lo siento, Cure. No debí entretenerme. Fue mi culpa en verdad.-- dijo Katja preocupada.

--No pasa nada, ya está conmigo. No la perderé más.

Por primera vez en mucho tiempo me volví a sentir tan enjaulada como el día en que Zeref me separó de mi amado gremio. Con un deseo increíblemente grande de zafarme de él y correr hacia mi gente, haciendo todo lo posible para que me recordasen.

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Sí, Gray me encanta, lo he vuelto a incluir en otra de mis novelas por que sí jajajaja. Aviso de que no subiré hasta el finde semana que viene por que me voy esta semana a un hostal joven con unos amigos huyendo de las procesiones de semana santa jajaja ( lo siento si hay alguien a quien le gustan pero yo no soy gran fan)