one shots ! maitake

fly me to the moon

one shot escrito con fly me to the moon, ver. evangelion.

se besan y chocan con la pared. takemichi siente que su piel quema y arde a rojo vivo, le duele y llora, pero mikey retiene las lágrimas con su lengua por un momento y lo sigue besando. como siempre, solo tapando su dolor solo por un momento.

por qué estaban así. puede que sea por las copas de alcohol que tenían encima, puede que sea por la canción que suena de fondo y se repite una y otra vez, puede que sea porque sus cuerpos se extrañan o puede que sea... nada justifica su estupidez.

pero aún así, se despojan de sus ropas y la piel de takemichi siente que puede respirar y se alivia en dolor de su corazón por unos segundos. las manos de mikey pasan por todo su pecho y cuello, sus labios se pasean por su rostro y no puede evitar sentirse amado. aunque sabe que no es amado, ese hombre nunca lo amo.

la canción de fondo lo hace sentir como en un baile, en medio de la noche como si estuvieran en un bosque festejando alguna fecha especial, pero solo están en medio de su apartamento, desnudos y siendo tomado casi sin consciencia, pero su cuerpo siempre responde a esas manos como si fueran sus creadoras y eso le dolía mucho.

— yo no quería verte... —murmuró para mikey, quien estaba encima suyo tocando y marcando su pecho. vio al rubio alzar la vista y quiso llorar. ya no lo amaba más.— esto es un error.

— por supuesto que es un error, pensé que no me volvería a acostar contigo pero aquí estoy yo... —sintió que aquellos labios asesinos dijeron y ya sabía que lo que iban a pronunciar ahora era la verdad pero no quería oírlo.— y chifuyu esta allá fuera, en su apartamento esperando a que llegues, ¿verdad?

hoy era su aniversario con chifuyu, su mejor amigo quien terminó siendo su novio. quien lo ayudo a olvidar a mikey hace años y con quien compartía su amor. iba a ir a su casa ese día, pero se encontró con mikey en el camino y no recuerda cómo es que terminaron así. se odiaba por no sentirse tan mal.

se levantó, porque chifuyu no merecía esto y él tampoco, mikey no podía merecerlo. estaba tomando su ropa del piso cuando sintió unos pasos atrás, su ex pareja lo tomó del abdomen y lo abrazó. lo hacía a propósito, quería quemar su piel y que entonces no tuviera excusa a su acto tan cruel.

— suéltame, en serio suéltame —dijo con las lágrimas desbordándose y un nudo en la garganta y en la boca de su estómago. quería quedarse, por lo menos para sentirlo por una última vez. pero no es lo que necesitaba ahora.— te lo ruego...

mikey no hizo caso a sus súplicas, porque takemichi tapó sus oídos con sus manos de manera indirecta y con los sonidos de su boca al ser besado. regresaron a la cama juntos, se enredaron con las sábanas.

feel my heart with song.

takemichi acariciaba la cara de mikey y como decía aquella canción, quería que sintiera su corazón. porque aún lo extrañaba tanto. no quería extrañarlo, no quería amar el roce de sus cuerpos ni el sonido de los besos de mikey en su cuello, no quería nada de él... pero lo necesitaba.

mikey besos sus manos cuando se dio cuenta que estaban en sus mejillas. odiaba esos detalles, porque lo hacían querer más.

pasaron toda la noche así.

uniéndose una y otra vez, sin descanso y sin amor de por medio. esa noche takemichi estuvo entre los brazos de mikey mientras cantaba la canción que la grabadora no paraba de reproducir.

only you, only you.

in other words, please be true.

despertó solo en casa, desnudo y con el frío viento acariciando su espalda, la mitad de la cama vacía y marcada. chifuyu estaba frente suyo mientras mostraba su celular con todas las llamadas perdidas, llorando y apretando un paraguas mojado. no se había dado cuenta que afuera el día lloraba. ¿también extrañas a mikey?

— es obvio que mikey estuvo aquí anoche, por eso no fuiste a mi apartamento —chifuyu dijo. takemichi estaba apenado, no tenía nada que explicarle, porque él sabía que lo que había hecho estaba mal. porque sinceramente ya nada le importaba, no se merecía a chifuyu y tampoco quería hacer nada para merecerlo.— me llamo, él me llamo en la mañana para decirme eso, que viniera a verte.

— perdón.

— me da igual, dios —su ahora ex novio —evidentemente— se tapó la cara, pudo ver que seguía llorando y solo atinó a levantarse de la cama y abrazarlo. no es que fuera necesario.— bueno... gracias por todo hasta ayer, takemichi.

parece que ellos solo podían ser mejores amigos, o puede que no, a lo mejor solo era que takemichi no quería poner de su parte para que esa relación florezca y eso era porque se había acostumbrado a otras sensaciones.

con chifuyu su piel no ardía, no sentía sus manos marcarse con calor sobre su cuerpo y tampoco se mareaba de la emoción. ¿eso es sano?

por eso, cuando estuvo completamente solo al cabo de una hora, se vistió y salió a buscar a mikey como siempre lo hacía. en el mismo bar donde el rubio se escondía después de arrasar con toda su estabilidad e integridad mental.

las otras muchas veces que lo dejo en la cama abandonando, con las palabras "quiérete un poco, takemichi" incrustadas en su mente, dichas siempre que le hacía el amor. él sabía que lo que hacía no era un acto muy propio de autoestima pero qué podía haber, qué debería hacer si su mente solo lo estimulaba cuando el rubio lo tocaba y le hablaba.

por ejemplo ahora, que se encontraba jadeando por el cansancio frente a la mesa donde mikey estaba comiendo. el rubio le sonrió.

— sabía que ibas a volver —sí, takemichi también lo sabía. porque era el único lugar donde pertenecía, aunque no quisiera.— ¿nos vamos?

quería retratar un poco una relación tóxica y la dependencia hacia alguien ?? aunque puede que no tenga mucho sentido puesto que nunca he pasado por una pero espero se entienda el concepto

aprovechando, quería comentar que empezaré una historia igualmente de mikey y takemichi en la línea temporal de bonten, por si gustan leerla :)
es posible que publique la introducción de la historia unos minutos después de este cap