Dímelo a Besos

Beso 6: Ladrien

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Beso 06

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La lluvia caía con fuerza sobre París, aun así, acaban de derrotar a un supervillano con mucha dificultad. Chat Noir no se había presentado, así que se vio obligada a buscar aliados que pudieran ayudarla, pero con el torrente de agua, fue difícil encontrar la ubicación de los superhéroes provisorios. Al menos a Alya y a Nino podía encontrarlos fácil, pero eso no significó que no quedara más cansada que nunca y solo quería llegar a su casa lo más rápido posible. Iba hacía su domicilio, cuando una silueta en el medio de la solitaria calle le llamó la atención haciendo que se estrellara contra la publicidad frente a ella.

Se detuvo para flotar su rostro y volver a ver si su vista no le fallaba, pero no, ahí estaba, en la fría lluvia, abrazado a su mismo con la mirada perdida caminaba Adrien Agreste.

Aprovechando la publicidad, se cubrió para destransformarse y darle de comer a Tikki para tener un poco más de tiempo. Con su transformación otra vez activa, buscó al muchacho con la vista ante de lanzarse hacia donde estaba.

—¡Adrien! —exclamó, haciendo que el chico se sobresaltara—. ¿Por qué estás todo empapado? ¿Sucedió algo? ¿estas herido?

El joven observó a la superheroina toda preocupada con él, haciendo que el nudo en su garganta se agrandara aún más.

—¿hubo un akuma? —preguntó, Ladybug seguía revisándolo por todos lados por si tenía alguna herida.

—Sí, nunca me cansé tanto, pero ya lo derrotamos.

—¿Por qué cansada?

Ladybug lo miró confundida. ¡Ella era la que estaba preocupada! ¿por qué era él, el que sonaba como tal?

—Ven conmigo —le dijo, tomando al chico y subiéndolo hasta donde estaba la publicidad que contrarrestaba bastante con el panorama frente a ella. En la gigantografía, Adrien tenía una sonrisa esplendida, en la real, parecía realmente abatido—. Aquí podemos hablar sin que te sigas empapando más de lo que estás. ¿qué paso?

—Solo tengo un mal día, la sesión de fotos era fuera de la ciudad, no solo salió pésima, sino que mi teléfono se echo a perder por la lluvia y la única oportunidad donde me siento realmente bien, la perdí por eso —comentó con los hombros caídos—. Estaba tan abrumado por los regaños de mi padre, mientras regresaba, que me salí del auto y llevo caminando sin rumbo, no sé cuanto tiempo.

—Bueno, todos tenemos un mal día alguna vez —trató de calmarlo con una sonrisa—. Yo siempre tengo un mal día —se rio de si misma, pero lo único que consiguió es que Adrien la mirara confundido—. Mira hoy, Chat Noir no apareció, así que fue muy complicado para mí, tener un ojo en la ciudad y otro en buscar a los portadores provisorios, con lluvia.

—Debió ser difícil...

—¡Y espero que Chat Noir tenga una buena excusa! —comentó, haciendo chocar sus puños, que sacó una leve risa en Adrien—. Sonreíste, eso es bueno. —aunque su sonrisa desapareció con suma facilidad— ¿Quieres contarme?

—Siento que soy un fracaso —exclamó de pronto, haciendo que la superheroina se sobresaltara—. Tengo quince años y aun no sé que quiero hacer de mi vida, todo lo maneja mi padre, como si fuera un títere más que su hijo. Estoy cansado, quiero explorar las cosas por mi mismo, disfrutar, equivocarme, aprender... ¿es que acaso eso está mal? ¿Por qué tengo que sentirme tan miserable por intentar agradar a mi padre?

Ladybug sin pensarlo mucho, simplemente lo abrazó, él le correspondió rápidamente.

—Odio sentirme así...

—Te entiendo —respondió, rodeándolo con los brazos—, créeme que lo entiendo perfectamente. Yo me he sentido así, pero no estás solo, tienes amigos que te quieren, que se preocupan por ti. —el cortó el abrazo, separándose de ella.

—No estoy tan seguro, ¿de que sirve tenerme como amigo? —negó con la cabeza, cruzándose de brazos, como si buscara abrazarse a si mismo, el frio de la lluvia había empezado a hacer estragos en su cuerpo—. No son digno de nada, ni siquiera digno de que alguien me quiera...

—¡Eso es mentira! —exclamó, presa del nudo que le estrujaba la garganta al estuchar a Adrien hablar así—. Si eres digno de amor —se llevó ambas manos al pecho, en un intento desesperado de calmar la tristeza que brotaba de su amado— yo te quiero... —dijo sin pensar.

—Eso que acabas de decir... —dijo completamente sorprendido, observó la perplejidad del rostro de la heroína, antes de que volteara con algo de nerviosismo.

—Yo... verás —Ladybug rascó su cabeza con rabia por haber cometido tan imprudencia, en eso sintió que su mano libre era tomada por ambas de Adrien, así que volvió a observarlo, encontrándolo casi al borde del llanto, sino es que ya lo estaba y las leves gotas que aun caían desde su cabello las camuflaba.

—Yo también —le dijo, acercándose a ella, mucho más de lo que pudiera ser sanamente para la salud mental de Ladybug—, estoy enamorado de ti —y se quedó ahí, prendido de la mirada celeste de su compañera hasta que está finalmente cortó el contacto para darle permiso de besarla.

Fue un leve contacto, que aumento un poco de intensidad por el remolino de emociones que ambos sentían. Besos que sabían a lluvia, lagrimas, y tal vez, a un poco de felicidad.

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Y este ha sido el capitulo de hoy: El promtps: Besos húmedos después de refugiarse de la lluvia.

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¿Qué tal? xD Este fue un besad

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Palabras: 886 (el más largo hasta ahora)

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Pero siempre que imagino al Ladrien se me vienen puros desastres y cosas tristes a la cabeza xD

Y este en particular, tenía la idea, pero desarrollarla me costó mucho ;o;

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En fin, siguiente pareja... Ladynoir 😉

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¡Gracias por leer!

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Aquatic~

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6 de octubre 2021