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Jay lo llevó a través del castillo, ignorando las llamadas de las pinturas a su alrededor que ya habían escuchado lo sucedido (aparentemente los chismes viajaban más rápido que la luz en ese castillo), llegaron a la torre de astronomía. 

—¿De verdad? ¿Quieres hablar aquí?— dijo Jungwon en broma. La última vez que hablaron en la torre de astronomía, las cosas no habían salido exactamente bien. 

Jay solo le sonrió. —Podemos reemplazar el mal recuerdo por uno bueno. 

Oh. El corazón de Jungwon se aceleró. 

Jay caminó al balcón y se sentó en el suelo, con las piernas cruzadas, mirando a Jungwon, quien hizo lo mismo. 

—Entonces—, dijo Jungwon, mirando a todas partes menos a la cara de Jay. 

—Entonces,— repitió Jay. 

Hubo un silencio incómodo, Jay estaba simplemente esperando, frotando el dorso de la mano de Jungwon con su pulgar para consolarlo.

—Lo siento—, finalmente murmuró Jungwon, con la mirada apuntando al suelo. 

—¿Por qué?

—Por estar emocionalmente estreñido. 

Jay soltó una carcajada. —No estás emocionalmente estreñido—, dijo. 

Jungwon finalmente lo miró, confundido. 

—Eres tímido—, explicó Jay. —Siempre lo he sabido.

—Pero... fui tan malo... y estúpido.

—Estabas asustado.
 
—Eso no es excusa.

—Y lo sabes ahora, así que está bien. 

—¿Por qué no estás enojado?— preguntó Jungwon con incredulidad.
 
—¿Quieres que me enoje?— preguntó Jay con una sonrisa. 

—No... es solo, cualquiera en tu situación lo estaría.

—No debí ser tan impaciente contigo. Te conozco, sabía que no estabas listo pero te presioné de todos modos. 

—Aún así, creo... —, comenzó Jungwon lentamente. — Que si no lo hubieras hecho, entonces no habría pasado nada. No me habría dado cuenta de que mis sentimientos por ti eran diferentes a lo que pensaba. 

—Sin embargo, tal vez hubieras estado en un mejor lugar para discutirlo. Me impacienté después de lo de este verano, imaginé que estabas borracho y no recordabas lo que dijiste, pero eso solo me frustró. Y eso de la relación falsa contigo tampoco fue la mejor estrategia. Ninguno de los dos manejó bien la situación. 

—¿Qué... qué dije exactamente ese verano?— preguntó Jungwon, sintiendo que sus mejillas se calentaban, no importaba cuánto lo intentara, no podía recordar nada de lo que sucedió entre ellos. 

—¿Realmente no recuerdas nada?— preguntó Jay. Jungwon negó con la cabeza, Jay dejó escapar un suspiro.  

—Lo siento—, dijo Jungwon, encogiéndose.
 
—No te disculpes, de todas formas me alegro de que haya sucedido, de lo contrario, nunca habría tenido el valor de moverme y hacer algo. Siempre supe que no me odiabas en verdad, pero hubo momentos en los que me cuestioné. Esa noche en la fiesta de regreso a clases, te emborrachaste mucho, y estaba este... chico que se acaba de graduar el año pasado, uhm, no recuerdo su nombre, solía ser Prefecto de Ravenclaw, como sea... Él estaba sobre ti, coqueteando, y tú eras completamente ajeno al hecho de que estaba tratando de acostarse contigo. 

Jungwon se sonrojó. —¡N-no, no es verdad!

—Lo es. Seguía tocándote y sonriéndote, ugh, maldito pervertido... como sea, tú estabas metido en tu pequeño mundo. Y yo, de alguna manera... dejé que mis celos tomaran el control y me metí donde no debía. Hice que se largara y después comenzaste a lloriquear. Estabas quejándote de lo malo que fui con él y seguías aferrándote a mi brazo. Fue realmente lindo, eres un borracho muy pegajoso—, dijo Jay descaradamente. 

bad blood ೃ jaywonWhere stories live. Discover now