O9

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Jungwon tuvo solo tres días de paz antes de lo inevitable.

Estaba sentado en la biblioteca, estudiando, cuando de repente una pila de libros cayó sobre la mesa junto a él.

—¿Qué diablos crees que estás haciendo?— dijo Sunoo.

Jungwon suspiró. Sabía que esto iba a pasar, pero rezó para poder evitar estar a solas con él por más tiempo.

—¿Qué quieres decir?— preguntó con calma.

—¿Qué estás haciendo con Heeseung?

—Salir con él.

—No te gusta.

—Pero yo le gusto.

—No es así como funciona—, escupió Sunoo.

—Eso no depende de ti—, dijo Jungwon, finalmente mirando al otro.

—Vas a lastimarlo, tú no sientes nada por él.

—Él lo sabe.

—¿Lo sabe?— Jungwon se congeló en medio de la oración que estaba escribiendo. —¿Él lo sabe, Jungwon?— repitió Sunoo. Jungwon suspiró.

—Él sabe... que tal vez... siento cosas por Jay. Dijo que quería ayudarme a olvidarlo—, habló en voz baja, soltando la pluma.

—No puede ser tan simple como eso.

—Podría funcionar.

—Pero no lo hará.

—No lo sabes.

—Jungwon, ¿te ves a ti mismo desarrollando sentimientos por Heeseung? ¿Tus sentimientos por Jay solo desaparecieron?

Jungwon guardó silencio. Honestamente ni siquiera había dejado que Heeseung volviera a besarlo en los labios, se tomaban de la mano, Heeseung le daba besos en la frente y en la mejilla, se acurrucaban en la sala común de Slytherin por las noches. Pero cada vez que Heeseung parecía querer besarlo, Jungwon ponía excusas o volteaba la cabeza para que el otro solo tocara su mejilla.

No sabía qué le pasaba. Se sintió bien cuando Heeseung lo besó antes, pero ahora, cada vez que se acercaban, Jungwon no podía evitar que la expresión rota de Jay apareciera en su mente.

—Solo han pasado tres días—, argumentó débilmente.

—No deberías usarlo para superar a Jay.

—No lo hago, no necesito superar a Jay, ni siquiera tuve algo real con él. Incluso si fuera así, él me lo pidió primero, Sunoo. Heeseung quiere esto.

—Él cree que lo quiere.

—¡No depende de ti, hyung!— dijo Jungwon tal vez demasiado alto, uno de los estudiantes cercanos los hizo callar con una mirada. El rostro de Sunoo se suavizó.

—No quiero que ninguno de los dos resulte herido—, dijo en voz baja. —Los vi a ti y a Jay besándose en la fiesta. Jungwon, hay sentimientos reales ahí, todos pudieron verlo. Creo que necesitas hablar con Jay antes de decidirte a intentar algo con Heeseung.

Jungwon suspiró. En el fondo, sabía que Sunoo tenía razón.

Pero Jungwon nunca ha sido bueno para lidiar con sus sentimientos.

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El segundo en enfrentarse a Jungwon fue, sorprendentemente, Ni-ki.

Jungwon nunca se había dado cuenta antes, pero el más joven era aterrador. El chico solo tenía catorce años, ¿por qué rayos era tan alto?

Jungwon salió de la sala común de Slytherin unos días después de su conversación con Sunoo para encontrarse al Hufflepuff parado afuera, apoyado contra la pared de la mazmorra. Sus brazos estaban cruzados sobre su pecho, mientras miraba a cualquiera que pasara por ahí.

bad blood ೃ jaywonWhere stories live. Discover now