Difícil de conquistar (MLB)

Conversando

Okey, por como lo dijo Marinette no se lo dijo luka entonces ¿Cómo se entero? No podía traicionar la confianza de mi amigo, le di un trago al liquido que me ofreció Marinette para aclarar mi garganta y poder hablar.

-¿Cómo sabes eso? ¿Acaso el te lo dijo?

-En la madrugada comenzó a sonar su móvil y eso hizo que me despertará, no era mi intención pero escuche su conversación y la verdad, quiero que acepte la propuesta, pero a la vez no, tal vez sea demasiado egoísta pero quiero que siga en París - soltó un suspiro para encontrar sus zafiros suplicando una respuesta - Adrien, ¿Tú que harías en mi lugar?

-Hablaría con el o esperaría que el me lo dijera, confía en el Marinette, se que a veces es un idiota pero daría todo por ti, sinceramente ni yo sabría como decirte algo así.

-Adrien, es como si tu no le dijeras nada a Kagami, la amas ¿Por qué se lo ocultarias?

No la amo, la única dueña de ese sentimiento eres tú

-Espera ¿Cómo sabes eso?

-Era obvio, vino a verte se besaron, regresaron - dio otra calada a su cigarrillo - Por eso me moleste contigo....

-¿Acaso un bichito estaba celosa?

-JA-JA-JA - se incorporo viéndome fijamente - No seas idiota, ¿Por qué me molestaría? Solo somos amigos, además se que la querías bastante, dudo que de la nada desapareciera ese sentimiento.

-De echo creo que así es - me recosté a su lado - Ni siquiera se por que estoy con ella.

-Adrien, es una mierda retener a alguien a tu lado si no sientes lo mismo tal vez ella en verdad te quiera, tal vez espera que esta vez funcione lo de ustedes deberías hacer algo al respecto, tal vez no me agrade, sin embargo es una jodida mierda esa sensación, pensar que todo va bien y la otra persona no lo vea así.....

-Mari......

-Adrien, se que alya te contó toda la historia con Nathaniel y gracias a eso no quería darme una nueva oportunidad con alguien, antes de eso había conocido a Luka, más bien, nos reencontramos sin siquiera saberlo, pensaba en el luego  conocí a Nathaniel ya que nunca más lo vi decidí darme una oportunidad con el ¿Qué podía perder? - se levantó caminando en círculos - ¡Error! perdí la seguridad en mi misma la confianza de dejar que las personas entrarán a mi vida, todo gracias a él, cuando tú y luka llegaron a mi vida, fue increíble, ambos son increíbles no tienen la maldita idea de lo que hicieron en mi, Luka sabe todo, bueno excepto lo de aquel imbécil, nunca encontré el momento para hablar de eso antes de comenzar una relación le dije lo que sentía por los dos, el me entendió aún así decidimos arriesgarnos a eso, ahora no se como dejarlo ir y tengo que hacerlo para que logre sus sueños, es el momento de volverme a arriesgar......

Quería alentará, estar junto con ella, ser el hombro en el cual se pudiera recargar sin embargo solo me quedé viendo la increíble chica frente a mis ojos, definitivamente estaba loco por ella, aún así sabía que ella estaba con mi mejor amigo, mi hermano, sentía bien saber que él fuera su pareja aún así me dolía pensar que ese podría ser yo.

-¿Hay espacio para alguien más?

Gire mi rostro encontrando a nino a unos cuantos pasos, Marinette inmediatamente corrió para abrazarlo.

-Por supuesto que si, te quiero.....

-Ey, ¿Ahora qué pasa?

Marinette

Okey, mi idea de estar sola y pensar se había ido al carajo desde que Adrien llegó, para ser sincera no estaba en mis cinco sentidos así que fue fácil decirle todo sin vacilar cuando llegó nino fue todavía peor, parecía que el alcohol comenzaba a hacer su efecto comenzaba a sentir que todo giraba a mi alrededor.

Me senté en medio de mis dos amigos encendiendo otro cigarrillo y como ya quedaba poco alcohol decidí tomar directamente de la botella.

-Ey, ey - me quito la botella de los labios colocándola a su lado - ¿Ahora qué te pasa?

-¿Y-yo? - me señale con una gran sonrisa - Na-nada estoy de maravilla con ustedes.

Le di un beso en la mejilla a Nino, el cual hizo que me recostara en sus piernas mientras peinaba mi cabello.

-Adrien, ella es demasiado tonta, dime ¿Qué tiene?

-¡Cuidado y abres tu boca minino!

Le di otra calada al cigarrillo para soltar el humo en el rostro de Nino, viendo su cara de preocupación y asco.

-Ya la oíste viejo, es mi amiga, la quiero y no pienso traicionar su confianza.

-¡No mientas! - me levante un poco viendo los verdes de Adrien viéndome detenidamente - Tú estas con Kakami y yo felizmente con mi azulito.

Una sonrisa seguramente boba se formó en mis labios al pensar en ese músico que ahora era el culpable de comerme la cabeza pensando en lo ideal para ambos, Nino inmediatamente entendió todo, realmente ser novio de Alya se le había pegado el enterarse de todo sin siquiera decirle o darse cuenta de pequeños detalles.

-Así que es sobre luka - hizo que me recostara nuevamente sobre el viéndome detenidamente - ¿Me equivoco?

-No quiero hablar, solo debe pensar bien en lo que debo hacer y lo que es correcto.

Seguimos hablando de demás temas, en ciertas ocasiones trataban de hablar de lo que me preocupaba, cosa que era fácil de ignorar y más por el estado en el que estaba.

-Bueno, tengo que ir a preparar la comida, nos vemos abajo.

Nino se fue dejándome nuevamente a solas con Adrien, sacó una pequeña caja de su chaqueta para extenderla a mi.

-Mari, esta no era la situación en la que pensaba dárte esto, pero no creo que esa situación llegue así que toma.

Coloco la caja entre mis manos, con el pulso tembloroso lo abrí encontrando una preciosa pulsera, parecía que Adrien me conocía a la perfección me encantaban ese tipo de cosas, gire mi rostro viendo su semblante preocupado.

-¿Te gusta? Tal vez te gustaría algo más sencillo y delicado.

-¿Bromeas? ¡Me encanta! Gracias minino.

Me lance para abrazarlo y aferrarme a su cuello dándole un beso en la mejilla.

-Gracias Adrien.

Me quedé así un rato, disfrutando de la paz que me brindaba adrien, parecía que el alcohol se había ido de mi sistema, mientras el me abrazaba por completo.

-Te quiero Bichito.

Justamente ladeo su rostro al igual que yo, quedando poca distancia entre nuestros rostros.

-¿Qué carajo pasa?

Me gire rápidamente encontrando a Luka viéndonos desde la puerta con una rosa roja en su mano.

-Luka, no es lo que crees...