Después de escapar del quebrado Reino de Fuego, Reki comenzará una nueva vida en el Reino del Agua, con el propósito era estudiar aquel lugar y aprender para ayudar en su propio reino, hasta que en una fiesta conocerá al príncipe del Reino de Agua.
...
Luego del cumpleaños de Miya, el príncipe Langa y Reki aprovecharon sus días en el reino de tierra para conocerlo, principalmente sus lugares turísticos. A veces Miya, príncipe de reino de tierra los acompañaba y ayudaba a la pareja cómo si fuera un mini cupido, otros días en cambio, despertaba con ganas de molestar a Langa y permanecía abrazado a Reki la mayor parte tiempo, provocandola irá del heredero del Reino de Agua. Mientras abrazaba a Reki, miraba al peliceleste con ojos de gato malvado mientras Langa sonreía falsamente apretando su puño.
Kaoru, más conocido cómo el rey Cherry, había accedido a brindar apoyo en caso que fuera necesario, esto respeto a la situación contada por los chicos (Reki).
- ¡Es muy luego para que vuelvan a sus tierras! ¿Nob se pueden quedar un par de días más? - preguntaba Miya apenado y ojos llorosos.
- Hijo, los reyes y el príncipe tienen una agenda bastante ocupada - le decía la reina del reino de tierra con un tono amoroso.
- Las puertas del reino de agua están abiertas para cuando quieras ir príncipe Miya, te estaremos esperando - le dijo Langa amablemente.
- ¡Gracias amigos! - respondió feliz.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
De vuelta al reino de agua, pasaron cerca de unas montañas nevadas.
- Ahora que lo recuerdo, me comentaste que practicabas Skateboarding, entonces no creo que te sea muy difícil el snowboard, así que practicaremos juntos en las montañas - le comentó Langa emocionado.
- Eso sería una gran experiencia para mi, príncipe Langa - respondió Reki tiernamente.
- ¡Ah! Maldición ¿Por qué tiene que sonreír y mirarme así? Me dan ganas de lanzarme sobre él y comerlo a besos - pensó Langa mientras se sonrojaba.
- Emm... Chicos... Creo que es un buen momento para que hablemos de lo que vieron - habló Joe nervioso.
- Jajaja tranquilo galán, no le diremos a nadie - respondió Langa riendo.
Nuevamente habían vuelto a aquel bello, húmedo y verde reino, Reki ya se estaba acostumbrado a ese clima y sólo llevaba semanas viviendo en aquel Reino.
Joe estacionó el auto a unas cuadras del taller de Oka.
- Reki... Ve a casa y deacansa, a partir de mañana comenzaremos nuevamente con trabajos del Reino, muchas reuniones y estudios, por lo que te necesito al cien por ciento - le recomendó Langa.
- Comprendo, por supuesto que estaré bien y lleno de energías, muchas gracias por todo - Reki dió una pequeña reverencia y se propuso a bajar del auto, pero Langa lo tomó del brazo y con la otra mano libre, tomó la cabeza del pelirrojo y lo acercó hasta sus labios y lo besó.
- Así es como te debes despedir... - le dijo coquetamente al oído.
Reki sólo asintió con la cabeza, un tanto aturdido por el repentino beso y por la fuerza del príncipe. Se bajó del automóvil con sus mejillas sonrojadas y movió la mano un tanto torpe para despedirse y comenzó a caminar hacia el taller de Joe.
