Después de escapar del quebrado Reino de Fuego, Reki comenzará una nueva vida en el Reino del Agua, con el propósito era estudiar aquel lugar y aprender para ayudar en su propio reino, hasta que en una fiesta conocerá al príncipe del Reino de Agua.
...
- Definitivamente somos iguales, ambos fuimos adoptados por Oka, bueno la verdad tú llegaste solo jajaja.
Sketchy seguía comiendo de su plato (Oka le había escrito el nombre "Sketchy" en la parte delantera)
- Espero que a Oka le esté yendo bien en su cita o lo tendremos con el corazón roto por mucho tiempo...
Sonó el timbre de la casa.
- ¿Será Oka? ¿Tan temprano acabó la cita? - se preguntó Reki mientras iba caminando para abrir la puerta, pero al abrirla se encontró con una inesperada visita.
- Buenas noches Reki... ¿Puedo pasar?
- ¡Príncipe Langa! Por supuesto, adelante - invitó cordialmente a entrar.
- Así que aquí es dónde vives, el taller mecánico de Oka... ¡Y tienen un perrito! - Sketchy se había asomado y le gruñía desde lejos.
- Con todo respeto ¿Qué lo trae por aquí esta noche?
- Simplemente quería conversar contigo de forma tranquila y alejados de todos, por lo que me escapé con la ayuda de alguien...
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Unas horas antes...
Langa había terminando la jornada laboral y el rey Oliver seguía viendo temas administrativos, por lo que el príncipe decidió ir a su habitación a descansar. Mientras estaba acostado, recordaba feliz todos los momentos que estuvo cerca de su pelirrojo favorito y se sonrojaba sólo al recordar lo insistente que era con él pidiéndole un beso.
Alguien golpeó la puerta.
- Adelante.
- Hola hijo ¿Estás muy ocupado? - Nanako asomó su cabeza por la puerta.
- No, para nada... Pasa.
Nanako entró mientras observaba la habitación de su hijo y un objeto en particular llamó su atención.
- ¿Eso es una tabla de Skateboarding?
- Si, estoy aprendiendo, más bien alguien me está enseñando y luego yo le enseñaré snowboarding.
- Ya veo, mi hijo salió muy bueno para los deportes al igual que su padre, porque a mi no pudiste salir, yo me canso corriendo unos metros jajaja.
- Lo sé, cuando era pequeño y jugabamos en la playa, nunca podías correr mucho jajaja.
Estuvieron unos minutos hablando del pasado y recordando historias graciosas, hasta que Nanako se armó de valor y le preguntó directamente a su hijo.
- Langa cariño ¿Recuerdas que me contaste que la noche de la fiesta conociste a alguien?
