Después de escapar del quebrado Reino de Fuego, Reki comenzará una nueva vida en el Reino del Agua, con el propósito era estudiar aquel lugar y aprender para ayudar en su propio reino, hasta que en una fiesta conocerá al príncipe del Reino de Agua.
...
Reki abrió sus ojos, despiertar con el sonido de la lluvia era algo nuevo para el, se acercó a la ventana a observar aquellas gotas que caían con gran intensidad.
-¡Reki! ¿Cómo dormiste? - Oka entró a la habitación con un par de toallas.
- Oka... No sé cómo podré agradecerte todo lo que has hecho por mi, realmente eres cómo un ángel.
- Eso lo veremos más adelante, además no lo hago con algo a cambio, es sólo que te ví y supe que no eras un mal chico.
Reki sonrió tiernamente.
- Por cierto, hoy a las tres, nos juntaremos en el parque con un buen amigo - dijo Oka con un tono misterioso.
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La lluvia había cesado, ambos se dirigieron a un parque cercano al taller de Oka.
- ¡Soy un despistado! Olvidé algo, iré rápidamente al taller y vuelvo - dijo Oka buscando algo en su chaqueta.
- Usa la moto, así te demorarás menos - Reki le lanzó las llaves y Oka hizo una excelente atrapada.
- ¡Qué emoción! Amo subirme en ella - Oka se fue como un niño pequeño con juguete nuevo.
Reki observaba a las personas que iban pasando, las personas del reino de agua se veían felices.
- Ojalá fuera así en mi reino - dió un largo suspiro.
A lo lejos se escuchaban un bullicio, lo que hizo que Reki mirara curioso, había un grupo de niños golpeando a otro más pequeño.
- ¡Que sucios! - Reki se levantó y corrió hasta el lugar a ayudar al menor y se interpuso en la pelea.
- ¡Oye feo quítate! Estamos hablando con el nene llorón de atrás - dijo uno de los niños.
- Realmente son unos cobardes, un grupo de seis chicos están pegándole y molestando a un niño menor que ustedes y que está solo, seis contra uno deja mucho que decir - Reki se paró frente a los chicos mientras cubría con su espalda al muchacho golpeado.
- Sólo le pedimos que nos compara helados, se veía que tenía mucho dinero - comentó otro niño.
- ¿Acaso siempre le sacan dinero? Más sucios aún - dijo Reki furioso.
- ¿Qué? No, es primera vez que lo vemos - respondió otro niño.
- La verdad no me gusta pelear con niños, pero si siguen molestándolo voy a tener que usar mis puños - Reki comenzo a estirarse cómo si se preparara para pelear aunque en realidad jamás golpearía a un niño.
Los chicos al ver a Reki preparándose, se asustaron y salieron corriendo del lugar.
- ¿Estás bien? - Reki comenzó a limpiar al pequeño.
