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Desde hace unos días aquel otro alfa había entrado en un juego bastante peligroso

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Desde hace unos días aquel otro alfa había entrado en un juego bastante peligroso.

Estar junto a MI omega.

Y lo peor de todo... Es que fue aquella persona que me dió la oportunidad de estar todavía con mi hermana...

Tomioka Giyuu.

Aunque lo aprecio y todo... Pero desde que me vió aquel día cortejando a Rengoku-san decidió hacer lo mismo.

Esto es oficial, odio el olor a sidra.

Y encima Tomioka-san siempre irradia ese olor para atraer a Rengoku-san.

Lo bueno es que no cae...

La mezcla entre los dos olores... Es raro, no me atrae.

Hora de intervenir, sino me quedo sin mi omega.

... Okey, el instinto alfa me está afectando mucho en el último tiempo.

— Rengoku-san, ¿puede venir?

Lo llamé desde la distancia, ví como hizo un pequeño gesto de alivio y se separó de Tomioka-san.

Escuché un pequeño "disculpa" y la cara de aquel pilar alfa enojada.

Quería sonreír como en los típicos cuentos cuando el villano gana, pero no sería tan malo... ¿O sí?

Ví como Kyo-san se acercaba rápidamente.

... "Kyo-san"... Me gusta.

— ¿Qué necesitas, chico?

— Quería saber si podríamos ir a algún restaurante o algo, ¡cómo el otro día!

Ví como su rostro se enrojeció un poco y se encogió ligeramente, asintiendo con la cabeza.

— ¡Claro, vamos!

Bien, querida billetera, te quedarás vacía junto a mis ahorros.

En quince minutos llegamos a un restaurante de ramen.

Ví como pedía grandes porciones de comida, solo decidí comer dos tazones, sino no podría pagar la cuenta.

Aunque el trabajo como cazador de demonios pagaba bien debía repartir los gastos para varias cosas.

Pero, ¿me estoy adelantando mucho a lo que sucederá en el futuro?

No lo sé.

No me di cuenta que el pedido ya había llegado, comenzando a comer.

Obviamente fui el primero en terminar, por lo que decidí observar como comía aquel rubio que me traía loco.

Vaya, con esto me recordó a Zenitsu cada vez que veía una chica, pero al menos no soy tan impulsivo como él, quiero tomar el tiempo para ver si mi relación con Rengoku-san funcionaba.

¿Quizás éramos destinados?

Ojalá...

Ví como me miró, volví a quedarme embobado observandolo.

Se enrojeció un poco de nuevo y volteó el rostro para no mirarme, pero su olor a chile dulce se incrementó un poco.

Era buena señal... Muy buena señal...

Y sí, mi lobo interior estaba saltando de la alegría.

Era precioso ver sus orejas ruborizadas de la vergüenza.

Pero rápidamente él comenzó a comer de nuevo, terminando todo lo que había pedido.

Salimos después de que pagué y casi quedar en bancarrota.

Íbamos uno a lado del otro, era de tarde, por lo que no teníamos que ir a cazar todavía.

Decidí dar el primer paso, o al menos mi madre siempre decía que los altas deben los primeros en ir en la relación, tomé su mano con lentitud y delicadeza.

Noté como se tensó un poco, volviendo a ser más notable su sonrojo en las mejillas y feromonas.

Decidí reírme un poco y él se avergonzó más, era una escena perfecta.

Lo voy a proteger por siempre, lo prometo.

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Mi omega, mi fuego... || TanjiroxRengoku / omegaverse ||Where stories live. Discover now