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-¿De qué...- Sonó el timbre.

-Cálmate- Tomó a su novio de la mano y se lo llevó del salón.

-¿Qué está pasando aquí?

-Te explico cuando estemos solos- Hizo presión con una mano en su estómago.

-¿Qué pasa princesa?

-Nada, solo me duele un poco el estómago.

-Vamos a la enfermería.

Por más que (TN) defendió el estar bien Chandler no cedió, en verdad él es un verdadero terco cuando se trata de su novia. Llegaron a aquella habitación y solo había un chico que estaba siendo atendido por la enfermera en turno.

-¿Qué paso?

-Me duele el estómago.

-¿Desayunaste?

-Tomé leche- Él chico que descansaba sobre la camilla rió.

-¿La leche de Chandler?- Preguntó con un evidente doble sentido.

Chandler a pesar de todo no pudo evitar reírse tras recordar la noche del sábado, (TN) miró al piso mientras agitaba sus manos.

-Creo que deberías comer algo- La enfermera se aguantó la risa.

-Vamos a la cafetería- Abrazó a su novia por detrás mientras avanzaban.

-¿Por qué te reíste?

-No puedes negar que fue gracioso.

-No lo fue- Soltó su mano y caminó sola por los corredores de la escuela.

-Hay amor no te enojes- Juntó sus manos otra vez y besó su mejilla.

-Bebé sabes que no me puedo enojar contigo- Lo acorraló contra un casillero y lo besó.

-Aquí no por favor.

Los comentarios volaron y volaron pero ambos siguieron su camino a la cafetería. Chandler volvió a preguntarle a su novia acerca del tema pero ella reitero lo mismo de siempre... "Después te digo".

-¿Qué quieres?- Le preguntó viendo lo que había en la cafetería.

-Quiero chocolate.

-Ok- Miró a la señora de la cafetería- Me da uno de esos chocolates y... una leche- Rió por lo último.

-Chan...

-¿De qué sabor la leche?-pregunto la señora

-De la normal- Contuvo la risa.

-Aquí tienes.

-Gracias- Le extendió el dinero.

(TN) como una niña pequeña se cruzó de brazos y fue a sentarse a una mesa, Chandler volteó y su novia ya no estaba, la buscó con la vista hasta que la encontró sentada sola en una mesa.

-Aquí tienes tu leche- Se la dejó en frente.

-No quiero tu leche- Dijo refiriéndose tanto al hecho en sí como al con doble sentido.

-Fue una broma- Se sentó a su lado.

-¿Por qué no te tomas tú la leche?

-Sería raro si me tomara mi propia leche- (TN) le pegó en el hombro.

-Me refería a la leche en caja- Le sacó la pajita.

-También me refería a eso- Mintió.

-Claro- Rodó los ojos.

Promesas y Deseos ➳ Chandler RiggsWhere stories live. Discover now