CAPITULO XIV

109 11 0
                                    


La casa se sentía sola y vacía. Se me ocurrió rentar una de las habitaciones a una persona conocida. Se lo propuse a Lena y estuvo de acuerdo. Empecé difundiendo la voz y una chica se mostró interesada. ¿Su nombre? ¡Viktoria! Sí, es una conocida, amiga de una amiga... 

Lena y yo le recibimos un año por adelantado. Le alquilamos la habitación de Rika que se encontraba frente a la mía. Al lado estaba la de Lena, pero ella dormía conmigo la mayoría del tiempo. De igual forma también dormíamos algunas veces en la suya, recordando que allí fue nuestra primera vez.

Con el pasar de los días, Viktoria comenzó a coquetearme y yo la ignoraba, pero Lena lo notó y se puso celosa. La noche del lunes, Lena y yo estábamos acostadas, ella sobre mi pecho y yo la rodeaba con mis brazos, como todas las noches.

- ¿mucho trabajo hoy? - me preguntó

- si cariño, mucho - le respondí. Pero estar contigo recompensa todo el esfuerzo. Pronto me graduaré y me ofrecerán un mejor cargo. - sentencié.

- Yulia, tenemos que hablar de Viktoria. No me gusta nada como te mira. He sido bastante paciente pero no sé por cuanto tiempo más lo permitiré. - dijo Lena.

- Lena, mi amor, la dueña eterna de mi corazón. ¿Estás celosa? - bromeé.

- sí - gimió. - más vale que se detenga.

- Cariño traquila, nada pasará. No tengo ojos para nadie más que tú, Elena Katina.

Cerré la declaración con un beso y pude notar como su cuerpo abandonaba la tensión que tenía momentos atrás.

- más te vale, Yulia Volkova- dijo en tono juguetón. - No estoy dispuesta a compartirte, ¿lo has entendido?

- Afirmativo, mi comandante - dije haciendo un gesto militar. - ¿Por qué mejor dejamos este tema y nos enfocamos en algo mejor? - dije, acariciando su pecho con suavidad.

- oh, sí, mejor - dijo haciendo lo mismo. Pude sentir su sonrisa cuando la besé y honestamente eso me llenaba de felicidad.

Prohibido. Cuando se siente lo que no se debe.Where stories live. Discover now