¿Peleamos?

Capítulo 28

El príncipe entrecerró los ojos.

-Quítate las botas -ordeno el castaño.

-¿Que?

-¡Quítate las botas! Si de verdad trataste de escapar, tus tobillos también deben de estar quemados -dijo el príncipe para después hincarse para poder quitarle las botas a la chica.

-¡Levántate! ¡No seas ridículo! -exclamo Rayla con desesperación, a lo que algunos guardias que andaban por ahí prestaron atención a la discusión.

-¡Tú no seas ridícula! -respondió el príncipe poniéndose de pie -¡Estamos a un paso de cambiar las cosas! ¡¿Y tú solo quieres irte?! ¡Se que algo te pasa, así que dímelo!

-¡No pasa nada! ¡Solo se que me quiero largar! ¡Sé que quiero alejarme de todo esto y adivina que, estúpido humano! Eso te incluye a ti -dijo Rayla con enojo para después darse la media vuelta y empezar a caminar.

-¡Rayla! ¡No puedes dejar las cosas así! -exclamo Callum, caminando detrás de ella.

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El ambiente en el castillo repentinamente se había vuelto muy incomodo para la mayoría de los que se encontraban ahí en ese momento, pues la noticia de pelea entre el joven príncipe y la bella elfa había corrido rápido entre los guardias y sirvientes. La mayoría estaban bastante seguros de que solo se trataba de una pelea pasajera, además de que no era algo que les importara realmente pero consideraban que no estaba de más comentarlo, pero había a quien si le preocupaba.

-Todo estará bien Ezran, en las relaciones sanas esta bien pelearse de vez en cuando -explicaba Claudia con una suave sonrisa -¿Verdad, Soren?

-Claro, por ejemplo nuestros padres peleaban pero ahora están bien -respondió Soren, a lo que Ezran alzo una ceja.

-Pero su madre ya no esta con su padre -respondió Ezran.

-Ah... claro, había olvidado eso -dijo Soren, a lo cual Claudia lo golpeo en el brazo.

-Es diferente, muy diferente de hecho -menciono Claudia -lo que queremos decir es que no tienes porque preocuparte, después de todo no es como si fuera la primera vez que se pelean, ya sabes a lo que me refiero

Ezran sonrió un poco, Claudia tenia razón, literalmente habían tratado de matarse y aun así  habían llegado hasta el punto de ser una hermosa y armoniosa pareja.

-Tienes razón, todo se arreglará

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Callum trepaba al techo donde sabía que encontraría a Rayla, habían pasado algunas horas desde su discusión por lo que el se encontraba más tranquilo y quería pensar que ella igual. Al subir, la vio ahí, contemplando una vez más como la noche estaba a punto de caer sobre sus tierras, ella se había dado cuenta de su presencia y el lo sabía, sin embargo, ninguno se atrevió a decir alguna palabra, el chico trato de tomar la mano de la chica pero ella la retiro rápidamente, a lo que el castaño suspiro con pesadez.

-Lamento haberte gritado hace un rato -murmuro Callum.

-Ambos gritamos -respondió Rayla de la misma forma.

-Rayla, esta mañana en el consejo todos estaban muy felices con el tratado pero no tomamos en cuenta... bueno, lo que tu dijiste, le comente a mi padrastro y ya tenemos una solución

La elfa miro al humano de manera atenta.

-Mi padrastro esta escribiendo una carta para la reina dragón, mañana al amanecer el maestro de los cuervos mandara el mensaje a Xadia

-¿Cual es el mensaje?

-El mensaje es para proponerle a la reina dragón el tratado de paz y saber si lo aceptará o no, así que nos enviará un mensajero dentro de unos días para decirnos si acepta o no...

Callum se tomo un momento, respiro profundo y continuo hablando.

-Tú estas en la carta, eres prácticamente la prueba de que humanos y elfos pueden llevarse bien, es por eso tan importante que estés con nosotros, que estés conmigo...

Rayla desvió la mirada sin responder nada, Callum empezó a hablar nuevamente pero esta vez de una forma más apresurada.

-Sé que quieres regresar y lo entiendo, entiendo que extrañas Xadia, que extrañas todo lo que conocías y esta bien, no te juzgo por eso pero con el tratado podrás regresar a Xadia libremente y yo podré ir contigo y conocer tu hogar, tu cultura o tu familia ¿Por que no? Lo importante es que estemos juntos 

Rayla sonrió un poco, no podía negar que le emocionaba tan solo pensar el mostrarle a Callum lo que era Xadia, sabía que estaría encantado con todo lo que pudiese conocer allá.

-Supongo que sería lindo...

-Lo sería, por eso debemos permanecer juntos, juntos nadie podrá vencernos

Rayla sonrió aun más y recargo su cabeza en el hombro del príncipe sin borrar su sonrisa y durante ese par de minutos se sintió segura, no porque tuviera a alguien a su lado ni nada por el estilo, más bien era por la idea de que todo pudiese estar bien pero esa idea desapareció cuando recordó al horrible humano que la amenazo. Sacrificar su vida estaba bien, pero ¿Sacrificar la de Callum y Ezran? Jamás, no lo permitiría, sabía lo que tenia que hacer pero tan solo pensar que tenía que alejarse del príncipe para salvarlo, le dolía y mucho. Lo veía ilusionado, emocionado porque parecía que todo acabaría por las buenas, no quería arruinar esa ilusión y esperanza porque...

¿Cómo podría explicarle a su tonto enamorado que las cosas no son tan simples?