Capítulo 8

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Cuando entró a su casa su cabeza, con ritmo vertiginoso, aún trataba de procesar todo lo que le había ocurrido aquella tarde, saludó a su mamá y subió a su habitación dónde ya la esperaba Luna.

- Serena, estaba preocupada por ti ¿dónde estabas? Rei y Darien llamaron. ¡Tardaste demasiado! ¿Quién te trajo a casa? Ese no era Darien ¿Verdad? –La felina la regañó, Serena rodó los ojos en señal de fastidio.

- Luna, estoy muy cansada fue un largo, largo día mañana platicamos ¿quieres?

- ¡No puedes seguir evadiéndome! –Gritó ya muy molesta, al fondo escucharon sonar el teléfono.

- ¡Y tú no puedes hablarme de esa forma! Te estoy diciendo que estoy cansada, no tengo ánimos para escuchar tus reproches. Al menos déjame en paz esta noche.

Luna estaba estupefacta, Serena jamás le había contestado de esa forma, normalmente era una chica más bien sumisa, su deber como consejera se estaba viendo afectado por este repentino cambio de actitud, la gata estaba a punto de volver a gritarle para hacerla entrar en razón, pero un grito, proveniente del pasillo, la obligó a desistir.

- ¡Serena! Te llaman por teléfono ¡Contesta, tonta! –Gritó Shingo

- ¿Quién es? –Sintió plomo en el estómago, temía la llamada de Darien; tarde o temprano tendrían que platicar.

- Una de tus amigas, no le pregunté.

- ¿Hola? –Dijo tomando la llamada

- Serena, pasaron muchas cosas en cuestión de horas, ¡Tengo mucho que contarte!

- Te escuchas alterada Mina ¿estás bien?

- ¿Qué si estoy bien? ¡Claro que sí!, bueno no... no lo sé... es que... es tan confuso que no sé si estoy feliz o al borde de perder la razón.

- Mina, no te estoy entendiendo. Explícame despacio.

- No sé por dónde empezar. –Suspiró- Yaten... él... él me dijo que...

- ¿Qué? ¿Qué te dijo?–La rubia se impacientó y preguntó oscamente interrumpiendo a su amiga. Sus propias dudas la volvieron a asaltar- "Ese bocón tal vez le dijo a Yaten y quizá Mina ya lo sabe." –Pensó.- ¿Dijo algo sobre Seiya?

- ¿Qué dices? ¿Seiya? ¡No!

- Entonces, ¿qué fue lo que te dijo?

- Bueno es que cuando tú y Seiya se fueron... Yaten me confesó sus sentimientos, está enamorado de mí.

- ¿Qué? –Gritó serena emocionada.- ¡Cuéntame todo por favor!

- Pues obviamente le dije que sus sentimientos son correspondidos, pasamos todo el día juntos. –suspiró- Serena, no le vayas a decir a nadie por favor. Ahora mismo estoy muy feliz y por eso quise contarte, sabes que eres mi mejor amiga, casi mi hermana. Pero las chicas... No sé como lo van a tomar.

- Seré una tumba, pero dime ¿qué pasará cuando se vayan?

- No lo sé. Ahora entiendo cómo te sentías cuando Darien se fue a Boston. –Serena respiró profundo ante el recuerdo y su corazón se estrujó al recordar los boletos que había visto esa misma tarde- ¿Pasa algo? Te quedaste callada.

- No, pero ¿crees que podamos discutirlo mañana? Si quieres podemos vernos temprano para discutir eso y para que me cuentes todos los detalles de tu historia.

Tan cerca del amorWhere stories live. Discover now