S. D. D

Extra 1: Su rastro (De rodillas)

Yan Qi, que estaba junto a la puerta, se rió fríamente y dijo: "¿Por fin estás dispuesto a mostrarte? Si no vuelves a abrir la puerta, a ver si me atrevo".

Cheng Jin estaba tan enfadado que le temblaban las manos: "¡Esta es la casa del Almirante, si te atreves a derribarla, es una ofensa!"

Yan Qi dijo: "¡Contaré hasta tres, si no abres la puerta, haré que alguien venga a derribarla! Uno".

Cheng Jin se asustó con este número, su valor se esfumó, y cuando escuchó la palabra "Dos", se apresuró a estirar la mano y abrir la puerta.

No pudo evitarlo, era un cobarde.

Después de todo, no había sido capaz de superar a Yan Qi desde que era un niño, y le tenía un poco de miedo porque siempre estaba encima de él.

Pero ahora que vio el aspecto de Yan Qi, se quedó un poco sorprendido. En menos de tres meses, todo el cuerpo de Yan Qi se había vuelto demacrado, y su rostro estaba realmente helado y con barba, muy lejos de su anterior aspecto gallardo y apuesto. Y cuando se acercó un poco más, todavía podía oler un extraño olor en su cuerpo.

Cheng Jin arrugó la nariz y no pudo evitar decir: "¿Cuánto hace que no te bañas?".

Yan Qi, por su parte, lo miró fijamente y preguntó con voz muda: "¿Dónde está el hermano Xu?".

Aunque ya sabía que había tenido una relación con su hermano mayor, Cheng Jin seguía sintiéndose incómodo al ver a una de las partes involucradas ahora. Dijo: "No lo sé". Dado que su hermano mayor intentaba evitarlo, debía ser porque Yan Qi le había hecho algo malo, así que no podía decirle a la otra parte el paradero de su hermano.

Cuando Yan Qi escuchó su respuesta, entrecerró los ojos peligrosamente y dijo palabra por palabra: "¡Dime!"

A Cheng Jin se le heló la espalda de miedo y se le subió al cuello: "¿Qué clase de mirada es ésa? ¿Vas a golpearme? ¡Adelante! ¡Si te atreves a hacerlo, mi hermano nunca podrá perdonarte!" Dijo, e incluso hinchó deliberadamente el estómago.

Sin embargo, Yan Qi no se dio cuenta de su embarazo, pero entendió el resto de sus palabras: "Entonces, ¿el hermano Xu está realmente bien? ¿Él, no está muerto?"

-"¡Bah, mi hermano no va a morir!" Cheng Jin recogió sus ropas: "Pero él no quiere verte, así que no lo busques, y no hay manera de que te diga su paradero".

Yan Qi cerró el puño y apretó los dientes: "¡Claro que voy a encontrarlo! Debo encontrarlo".

Su mirada hizo que Cheng Jin se asustara un poco: "¿Estás buscando a mi hermano... para vengarte de él? Yan Qi, ni siquiera puedo entender cómo se enredaron juntos. Obviamente hay una diferencia de edad tan grande..."

Yan Qi dijo: "¿Qué puedes averiguar?"

-"Tú, incluso me has humillado ......" La cara de Cheng Jin se puso roja de ira y exclamó: "¡Aunque no sepa toda la historia, puedo deducir que debes haber forzado a mi hermano! A mi hermano le gustaban todas las mujeres, y las cuñadas que me trajo eran todas chicas guapas, así que ¿cómo ha podido tomar la iniciativa de liarse contigo? No es gay".

Yan Qi no parecía querer romper tanto con él y se limitó a preguntar: "¿Dónde está el hermano Xu?".

-"¡He dicho que no te lo diré!" Cheng Jin frunció el ceño, pero pronto su tono se suavizó de nuevo: "Yan Qi, en realidad, eres muy guapo, joven, y ahora eres el hombre más rico, ¿qué clase de gente quieres? Si quieres encontrar a alguien que te divierta, no acudas a mi hermano. Cuando eras niño, ¿mi hermano no te trataba bien? Fue más gentil contigo que con tu propio hermano, así que déjalo ir, no lo molestes, tampoco es fácil para mi hermano".