S. D. D

Capítulo 69: ¿Has recuperado la memoria?

-"No, nada inusual". Cheng Jin trató de reprimir el miedo en su corazón y dijo en un tono normal.

No sabía qué era lo que tenía contra su espalda, pero sabía que si decía la palabra "sí", seguramente le atravesaría el corazón y lo mataría en el acto.

Los guardias no le creyeron de inmediato, pero como Lu Tao y Ai Xue estaban aquí, guardaron sus armas y se limitaron a bloquear la puerta con firmeza. El guardia de la cabecera dijo: "Señora del Almirante, por favor, entienda que tiene que quedarse aquí un rato más, tengo que investigar el vídeo de vigilancia". Hizo una pausa: "Sólo para confirmar con usted de nuevo, no ha salido desde que el Dr. Gerson se fue, ¿verdad?"

-"Sí". Cheng añadió rápidamente: "Pero abrí la puerta un poco, no mucho antes de que llegaras".

El guardia preguntó: "¿Por qué?"

Cheng Jin miró a Lu Tao antes de decir: "Quería ir con mi marido, pero acababa de abrir la puerta cuando recordé que mi marido me había dicho que no saliera aquí antes de que él llegara, así que la volví a cerrar inmediatamente."

-"Bien".

Ni siquiera se fue, usó la pantalla de luz para ver el vídeo de vigilancia y lo observó detenidamente en el lugar, Lu Tao también se acercó a mirar.

En cuanto su marido se marchó, Cheng Jin pudo sentir que la presión que ejercían contra él a sus espaldas se aflojaba un poco, y soltó un suave suspiro de alivio, pero ya estaba sudando tanto de estar tan tenso que su ropa interior se estaba empapando.

No había nada inusual en la vigilancia, excepto la escena que Cheng Jin había mencionado, y aunque esa escena era extraña, el guardia no pudo encontrar nada malo en ella porque Cheng Jin lo había explicado de antemano. Al ver que el guardia seguía teniendo dudas, Cheng Jin, en un raro alarde de ingenio, dijo: "Tal vez puedas investigar la vigilancia de la habitación y puedas demostrar que lo que he dicho es cierto".

-"No hay vídeo de vigilancia en esta sala". El guardia apagó la pantalla luminosa: "El Dr. Gerson dijo que implicaría la privacidad de sus pacientes, por lo que no se permitió su instalación. Señora del Almirante, lamento haberla asustado, gracias por su cooperación, seguiremos adelante y nos en otro lugar".

-"No, está bien...", sonrió débilmente Cheng Jin.

Aunque Lu Tao seguía de baja y se le consideraba un "paciente", fue reasignado temporalmente para unirse a la caza del asesino debido a sus increíbles habilidades detectivescas, y antes de marcharse, dispuso que Ferri acompañara a Cheng Jin a la salida.

Los controles eran tan estrictos como siempre, y Cheng caminaba con paso pesado, ya que podía sentir "la cosa" en su espalda, y la cosa con la que le amenazaba seguía presionada contra su espalda. El objeto no era demasiado pesado, debía de rondar las 40 o 50 libras, por lo que a Cheng no le resultaba difícil cargarlo, pero estaba tan asustado que se sentía débil.

Al ver su rostro pálido y sus labios ligeramente temblorosos, Ferri pensó que estaba asustado por la amenaza que acababa de recibir, así que abrió la boca para pronunciar unas raras palabras de consuelo.

El peso en la espalda de Cheng Jin no se alivió ni siquiera después de haber abandonado fácilmente el hospital militar, y aquella vocecita volvió a sonar en sus oídos: "Vamos solos".

A Cheng Jin le entraron ganas de llorar, así que tuvo que agradecer a Ferri por haberlo acompañado y se metió solo en el coche.

Cuando se sentó en el asiento, por fin sintió una ligereza a su espalda y la amenaza contra él desapareció. Cheng Jin estaba tan asustado que casi se encogió en un ovillo y preguntó con voz temblorosa: "¿Eres, eres un fantasma?".