S. D. D

Capítulo 70: Conoce la existencia de la segunda personalidad

Una vez dicho esto, el sargento An quiso volver a hablar, pero al menos se contuvo. Lu Tao miró a Cheng Jin y le preguntó: "¿Puedes decírmelo?".

Era un momento en el que los dos estaban pasando por algo juntos, así que, por supuesto, Cheng Jin sintió que podía decírselo a él, y le dijo tímidamente: "Sí..., pero que no te oiga nadie más, y sin cámaras... sólo tendré que decírtelo a solas, marido. "

El sargento An no pudo contenerse más y exclamó: "¡No! Señor Cheng, tiene que decirlo delante de todos, ¡se trata de la vida del Ministro de Estado, y de la seguridad de toda la humanidad!"

Cheng Jin no entendía cómo algo tan personal podía ser tan importante, sólo se sintió asustado cuando vio la mirada feroz de la otra parte, su cuerpo se encogió, y miró a su marido con resignación, "Realmente no puedo decírselo a nadie más, sólo puedo decírtelo a ti, marido..."

La insinuación de que estaba pidiendo ayuda era demasiado obvia, y hubo cierta vacilación por parte del general jefe Moss cuando Lu Tao fue a ver a su superior inmediato. Tras algunas deliberaciones, Cheng Jin fue conducido por Lu Tao a otro pequeño salón.
Cuando vio que no había nadie dentro ni cámaras, Cheng Jin finalmente respiró con alivio y se lanzó inconscientemente a los brazos de su marido. Cuando se abrazó al cálido cuerpo de la otra parte, su mente temblorosa se calmó un poco, pero aún se sentía agobiado "Yo no he hecho nada malo, ¿por qué son tan agresivos..."

-"El asunto es importante". Lu Tao le acarició suavemente la espalda: "¿Puedes decírmelo ahora?"

Cheng Jin asintió suavemente, antes de que pudiera hablar, un rubor ya había subido a sus mejillas, levantó la cabeza avergonzado para mirar a su marido y volvió a bajar la cabeza tímidamente antes de decir: " 'Él' dijo que me había visto".

Cuando Lu Tao escuchó esto, su voz se volvió repentinamente mucho más seria: "¿Cuándo? ¿En qué lugar?"

-"Supuestamente el día que fuimos de viaje turístico a Planeta Sol, creo que fue en el tren".

La línea de los labios de Lu Tao se tensó imperceptiblemente por un momento, y rápidamente preguntó: "¿Por qué dices 'supuestamente'?"

-"Es casi seguro...", Cheng Jin se inclinó en sus brazos en una posición completamente dependiente, sus mejillas sonrojadas y sus ojos llorosos mientras lo miraba, "Dijo que observó la mitad de la tarde que estábamos haciendo, haciendo..."

-"¿Haciendo qué?"

La otra parte no tenía el tono coqueto habitual, sino que preguntaba muy seriamente, como si lo hubiera olvidado por completo. Cheng Jin entonces un poco de agravación, susurró: "Sexo ah, ese día lo hicimos durante mucho tiempo... Todo porque me engatusaste, y dijiste que nadie vería, y el otro lado de alguna manera vio..."

Al escuchar esta inesperada respuesta, el Almirante se puso rígido, las pupilas se contrajeron ligeramente, unos fuertes celos y una acidez inundaron su corazón, haciéndole casi perder la cabeza, pero finalmente se contuvo y dijo: "¿Hay más?"

-"No hay nada más, dijo que se bajaría cuando llegara". Cheng Jin le rodeó la cintura con los brazos y se la frotó, "Este tipo de cosas, definitivamente me da vergüenza decirlo delante de tanta gente, de lo contrario, ¿no sería conocido por los demás la...?"

Lu Tao le miró fijamente, toda la línea de su rostro era transparentemente estoica, y sólo después de unos segundos dijo: "Ahora se han enterado".

El interrogatorio terminó, y Cheng Jin se quedó solo en una pequeña sala de reuniones, con un miembro del personal muy amable que traía leche caliente y deliciosos bocadillos, pero Cheng Jin ni siquiera se molestó en tocarlos, todo su cuerpo seguía en un estado de extrema vergüenza.

Su conversación había sido escuchada. ¡Había un micrófono en ese salón, o en el cuerpo de Lu Tao!

Cheng Jin no tenía ningún sentimiento de molestia por haber sido engañado, sino sólo una vergüenza infinita. La idea de que se hiciera público algo tan lascivo que había hecho era como una ejecución pública.

¡No debería venir nunca más al cuartel militar!

Cheng Jin se cubrió la cara y esperó a oír pasos antes de atreverse a levantar la vista. Esperaba ver a su marido Lu Tao, pero en cambio no esperaba ver a un musgo de rostro amable.

Cuando Cheng Jin lo vio, su cara se puso aún más roja y se levantó tímidamente para saludarlo: "Señor Moss, hola, hola".

Moos sonrió y agitó la mano: "Siéntate, no te pongas nervioso y no te sientas avergonzado, tú y Lu Tao son pareja legal, lo que quieras hacer es legítimo".

Cheng Jin era tan tímida que no se atrevía a mirarle.

-"De hecho, tengo que agradecerte tu colaboración esta vez, el gesto de hace un momento te debe haber asustado, ¿no?"

Cheng Jin apenas pudo negarlo y asintió suavemente, susurrando: "Ellos... eran tan violentos".

-"En realidad, es comprensible, después de todo, si el Ministro del Interior está en peligro, toda la Oficina de Seguridad tendrá una responsabilidad no menor, por eso tienen tanta prisa". El tono de Moss era suave: "Y en el departamento militar estamos ansiosos por encontrar esa quimera para poder eliminar un poderoso peligro oculto para la humanidad".

-"¿Un poderoso peligro oculto?" Cheng Jin estaba un poco desconcertado y dijo ingenuamente: "Pero creo que la otra parte... parece, no parece una persona muy mala..."

-"Eso no tiene que ser tu ilusión". En realidad, Moss no refutó sus palabras y continuó: " 'Quimera' esta investigación se experimentó hace más de cien años, pero todos los datos experimentales de entonces fueron un fracaso. Esta vez en el asesino, si no fuera por ti, nuestra dirección no habría adivinado hacia la "quimera", también fue un descuido por nuestra parte, después de todo, había una "quimera" justo a nuestro lado."

Cheng Jin estaba aún más desconcertado: "¿Hay uno a nuestro lado...?"

-"Así es, tu marido, Lu Tao." Moss dijo: "En principio, esto es un secreto militar y no tienes derecho a saberlo aunque seas la pareja de Lu Tao, pero dada la contribución que acabas de hacer con la pista que has proporcionado, por lo que personalmente consideré necesario decirte la verdad, y después de discutirlo, los demás estuvieron de acuerdo."

Cheng Jin ni siquiera pudo escuchar esas palabras después de él, toda su atención estaba en el frente: "¿Dijiste que mi marido era una 'quimera'?" Pensó que era absurdo, ¿cómo podía ser posible?

Moss se apresuró a decir: "Fue mi redacción descuidada, él era temporalmente una 'quimera' después de los efectos de la toxina de los insectos, inspirando así una segunda personalidad. Su anterior cambio drástico de temperamento se debió a su segunda personalidad, pero los efectos de esta toxina están disminuyendo y Lu Tao ha vuelto temporalmente a su personalidad principal. Según la sentencia, la fecha en que su segunda personalidad desaparecerá por completo debería acercarse pronto".

-"¿La segunda personalidad de...?" Estas pocas palabras explotaron en la mente de Cheng Jin, como si hubieran sonado numerosas alarmas punzantes, haciendo que todo su cuerpo se congelara.