Wattpad Original
There are 5 more free parts

Capítulo 8: Primer día

5.7K 460 108
                                    

El día por fin ha llegado. Hoy comenzaré mi maestría, y aunque estoy algo inquieta, me siento tranquila.

Sé que no lo haré mal porque tengo muchas ganas de hacerlo bien, y eso fue lo único que necesité cuando estudiaba en la UCV... Y como al final eso fue lo que me trajo aquí, supongo que mantener la fórmula ganadora no puede producir resultados adversos. Todo está en confiar en ti misma, Érika Díaz... ¡vamos!

He pasado todas las vacaciones de verano estudiando para estar a la altura; al mismo nivel que los demás alumnos. No quiero ni siquiera pensar en las consecuencias de fallar el curso, no vaya a ser que las malas energías se apoderen de mí...

«Vaya, ya estás hablando como Sabina», me reprocha mi cerebro.

¡¿Qué?! Es divertido. Quizás en eso mi compañera de piso no esté tan equivocada. Si tan solo se bañara al menos un poco más seguido... ¡Ay no, no empecemos otra vez! Eso no importa ahora. Ahorita solo tienes permiso para pensar en los músculos, los huesos, los ligamentos... ¡Concéntrate, Érika, tú puedes!

Llego al salón cuando solo faltan quince minutos para las ocho. El lugar ya está lleno de gente. Apenas unos pocos se fijan en mí cuando entro; la mayoría sigue en lo suyo: muchos hablan por teléfono o conversan con el estudiante de al lado. Varios parecen conocerse.

Lo que más me sorprende es que a diferencia de mis clases en Venezuela, donde casi todos llegaban tarde siempre, por cierto, es que la mayoría de los estudiantes aquí son hombres. Allá, , en cambio,, casi siempre eran mujeres las que llenaban los salones de clase. En esta nueva aula creo que soy la... tercera, no, la cuarta... Soy la cuarta mujer del salón...

Termino de caminar por la hilera de escritorios (¡todos son bellísimos, por Dios!) hasta que llego al mío, al parecer. Y tiene mi nombre... Ehm, claro. Tiene mi nombre. Tiene mi nombre tallado en un cartelito...

Okey, esto no me lo esperaba.

¿Ya les dije que tiene mi nombre? A ver... El escritorio, esta maravillosa pieza de madera artesanal que se ve muy antigua, tiene un cartelito chapado que dice: Érika Díaz... Y yo estoy a punto de morirme.

«Tiene tu nombre, Érik...».

OK, ya siéntate. No pasa nada. Actúa normal...

A un lado hay un chico anotando en su libreta. Al otro está una chica que habla seductoramente con un hombre bastante mayor. El chico de la libreta acaba de notarme, me está observando mucho, parece intrigado, y aquí viene en tres... dos... uno...

—Connor Green, mucho gusto.

Tiene su mano extendida hacia mí. Se ve simpático; quizás un poco curioso, pero simpático al fin y al cabo.

—Érika... Érika Díaz, un placer.

Le contesto mientras tomo su mano protocolarmente.

—Mm, no me suena tu apellido —me dice—. ¿Acabas de graduarte?

Aunque la pregunta parezca pretenciosa, en su voz suena más curiosa que cualquier cosa. Lo sé por la expresión de sus ojos, que son grises, y resaltan mucho con su cabello oscuro y su piel blanca.

—Sí, de hecho. Me gradué en enero.

Él hace un gesto de entendimiento con los dedos.

—Debe ser por eso que no me pareces familiar. Yo me gradué hace dos años y este año volví por la maestría, ya sabes... Una vez que la Ecce Homo te atrapa no te suelta.

Al parecer cree que estudié antes aquí en Malta.

—No, no, yo no...

Pero mis intentos de aclararme son automáticamente interrumpidos por la puerta del salón. Un hombre entra con una taza de café en la mano, un fajo de carpetas bajo el brazo, y un cigarrillo en la otra mano.

¡Nudista a la vista!Where stories live. Discover now