Alice in Jojoland...♦️

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Buenas a todas!. Sé que esto es algo tarde pero aquí está!.

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Elegí el camino de diamantes. La noche era muy oscura pero, para mí suerte, el camino estaba lleno de flores de diamantes que, con la luz de la luna, iluminaban el camino. A pesar de que mi camino era iluminado, sentía la presencia de alguien o algo observando me. Siempre pensé que la noche era muy peligroso así que nunca salía sola.

Empecé a correr cuando la presencia se fue acercando a mi persona, entre en pánico y no me fijaba para donde corría o si el camino principal se dividía en dos o más hasta que, a lo lejos, ví un enorme castillo. Alegre de saber que sus luces estaban encendidas, corrí más deprisa hasta llegar a su portón dónde había dos guardias. Ellos se veían como naipes y la forma de un rombo rojo en el medio era parte de la blanca figura que ellos tenían.

- Por favor, ayúdenme!. - Grité asustada.

Ambos guardias no se lo tomaron bien y levantaron sus armas. - Quien anda ahí?. - Cuando me vieron las bajaron. - Que hace una chica como tú en el bosque diamante?.

- Estoy perdida y... - Traté de retomar el aliento. - Algo o alguien me persigue.

Los guardias se miraron y asintieron. - Podemos preguntarle al rey para que puedas entrar pero...

- E-Esta bien... - Asentí frenética. No quería estar en ese lugar ni un poco más.

El guardia que se quedó conmigo me miraba de arriba abajo y sonrió. - No te preocupes. - Mencioné mientras miraba para ver si su compañero regresaba. - El rey de seguro que te dejará entrar.

Sonreí un poco aliviada cuando el otro guardia llegó, me hizo una seña para que me acercara y entramos al castillo.

- El rey dijo que quería conocerte en persona y hablar sobre lo que viste en el bosque... - Me sonrió y también me entrego ropa. - Esto es de su parte.

- Oh muchas gracias. - Mencioné mientras veía un hermoso vestido celeste con detalles en blanco de flores en la falda.

Caminamos en los hermosos pasillos decorados de rojo y dorado aparte de sus paredes de mármol. Había pequeños animales corriendo por el lugar también pero me llamo la atención los hermosos pájaros de color azul volando por los mismos pasillos. También había colibrís de hermosos colores pero podía identificar a uno en específico aunque tuviera otro color y era el "colibrí chino" aunque él era de colores cálidos y brillantes, realmente, el colibrí chino solo tenía tonos verdes y, "en su oreja", hay una larga pluma azul. Todo ese lugar lleno de animales de cualquier especie y que tenían varios colores era hermoso.

Llegamos a una habitación donde debía cambiarme, todo el lugar estaba lleno de estrellas que iluminaban la habitación y flotaban a mi alrededor, sonreí, era tan extraño pero, aún así, tan hermoso. Procedí a ponerme el vestido y caminé hacia la cama para sentarme a ver las estrellas, toque suavemente una y cambio de color, de un amarillo a un rojo. Escuché la puerta detrás y giré para verla.

- El rey está listo... - Menciono el guardia mientras sonreía. - Debería venir conmigo.

- Está bien. - Me levanté de la cama y caminé hasta la salida.

De nuevo en los pasillos, los animales corrían, saltaban y volaban alegres hasta el comedor donde me vería con el rey de diamantes. Me puse nerviosa por qué no tenía casi nada de modales para hablar ni para la mesa. Cuando llegamos al enorme comedor, no solo era hermoso el lugar rodeado de flores enormes que lo llenaban de color sino el mismo rey en sí.

- He aquí nuestra invitada, su majestad. - Menciono el guardia e hizo una reverencia.

- Mucho gusto en conocerte, Alice. - Sonrió.

- S-su majestad!. - Hice una reverencia como el guardia. - El gusto es mío, su majestad.

Él empezó a reír y lo mire extrañada. - No debes decirme "su majestad" todo el tiempo. Eres nuestra invitada así que llámame Jonathan.

- Jo-Jo... - Trate de decir su nombre pero me miró sorprendido y sonrió aún más.

- Jojo! Me encanta!. - Exclamó con un toque infantil. - Bien,Alice,necesito que te sientes y hablemos lo del bosque.

- S-si, Jojo. - Sonreí y me senté.

Los animales correteaban por el comedor y trajeron unos lindos postres bien decorados, sentí que me estaba babeando y mis ojos formaban estrellas.

- Alice. - Me llamo Jojo. - Cuéntame qué pasó exactamente.

- Bueno... - Trate de recordar lo que había pasado hace unas horas. - Algo me perseguía. Tenía un aura muy amenazante contra mi y decidí correr sin mirar atrás.

- Ya veo... - Asintió. - Bueno, en el bosque vive un animal que no viene a visitarme hace mucho tiempo...

- Un animal?. - Pregunté mientras llevaba un pedazo de los postres que había.

- Si. Es un león blanco de manchas negras... - Sonrió asintiendo. - Yo lo llamo Danny.

- Danny?. Es un lindo nombre.

- Si pero, últimamente, ha estado comportándose de manera rara. - Dijo mientras miraba hacia otro lado. - Está muy agresivo, eso debe ser obra de la reina de corazones...

- Reina de corazones?. - Pregunté.

- Lo conoces?. - Me miro curioso.

- No... - Miré hacia afuera y la noche parecía terminar. - Pero supongo que seguiré su camino,ya sabe, el camino de corazones.

- Entonces te pediré que ayudes a mi querido amigo. - Hablo firme. - Estoy seguro de que le hizo algo.

- Pero... - Miré al rey y vi sus ojos, mostraban lo frustrante que era no poder ayudar a ese león así que asentí. - Haré lo mejor que pueda.

- Muchas gracias, Alice!. - Exclamó alegre. - Me puedes decir finalmente tu nombre?.

- Si. Mi nombre es T/n... - Respondí un poco somnolienta.

- T/n, por favor, salva a mi amigo. - Se acercó a mí y dejo algo en mis manos. - En el camino de corazones anochece mucho más rápido que aquí y dura mucho más tiempo así que toma esto. - Con mis párpados que caían despacio, ví un par de aretes con forma de diamante. - Te iluminarán hasta en la noche más oscura.

- Si, Jojo. - Asentí apunto de dormirme.

- Gracias, t/n. - Sentí como besaba mis mejillas. - Nos vemos pronto.

Mi cabeza cayó en la mesa y, finalmente, me dormí. (Tremendo sopapo).

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Me levanté mirando hacia adelante, el piso se sentía húmedo como si hubiese llovido pero me sorprendió encontrarme otra vez delante de los 4 caminos. Miré el camino de diamantes pero estaba cerrado con una reja y candado.

- El próximo es el camino de corazones!. - Me hablé decidida mientras me levantaba del suelo y limpiaba el vestido que el rey Jojo me había dado.

To Be Continued>>>>>

Chan chan chaaaan!. Diamantes y corazones están conectados de alguna manera y eso lo sabrán en el próximo camino, el de corazones.

Espero que les haya gustado y nos vemos!.

Jojo's Love Hikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin