Cenizas del ayer

Capitulo 1

-¿Vas a tiempo?

-mm —Ve el telefono— a tiempo, nos vemos —Le da un beso en la mejilla

-Nos vemos —Sonrie

Se dirije al ascensor para ir al primer piso.

Vivía en un edificio lo suficiente cerca de mi trabajo para evitar llegar con retraso más de lo usual si se me presentaba algo.

Había quedado en un café cerca de aquí para hacer una entrevista de trabajo, no me gustaba quedar en la oficina pues me ponía en su lugar y tal vez el estar encerrado en un sitio así lo pondría más nervioso de lo normal y eso no nos convenía a ninguno porque no me demostraría su potencial.

Mi trabajo era encargarme de contratar, liderar y establecer objetivos para que todo fuera en orden, si algo salía mal era mi responsabilidad, por eso debía contratar y hayar a los indicados, por suerte y hasta ahora no había tenido problemas al respecto, aún así prefería prevenir.

-¿En el café señorita Elizabeth?

-Si por favor pablo

Asiente.

Se detiene en el semáforo en rojo y desvía la mirada alrededor mientras espera dando con el gran he imponente edificio.

Debería sentir algo, siquiera un vuelco en el corazón pero no me generaba ni el más mínimo sentimiento de atracción, me encargué de suprimir, estrujar bien todas esas emociones débiles que no se necesitan pues para poder sobrevivir en esta vida hay que deshacerse de los sentimientos..

Ve alrededor y al identificarlo se acerca enseguida, cuando esté se percata de ella se levanta del asiento rápidamente.

《Responsable》 —Piensa

-Señor brown —Estrecha su mano

-Usted debe ser la señorita elizabeth, un placer.

-Tambien es un placer, lamento la demora.

-No sé preocupe.

-¿Un café señor brown? —Llama al Garzón

-Claro, muchas gracias.

Trata de ocultar la sonrisa.

-Buenas tardes señorita.

-Buenas tardes, dos cafés porfavor

-Enseguida

-Bien señor brown, comencemos, ¿le parece?

-Por supuesto

-Hableme de usted

-..¿Que?

-Hableme de usted, sus ocupaciones, ¿tiene hobbies?, a que se dedicaba antes de esto.

-Oh claro, bueno, era encargado de las finanzas en un banco

-¿A si?, eso es muy curioso, cuénteme más.

-Si, bueno, es que..

-¿Cuantos años llevaba trabajando en aquel banco?

-Perdon, sus café.

-gracias —Lo recibe

-Que lo disfruten —Se retira

-Quince años

-No es un tiempo menor, me genera mucha curiosidad saber porqué ocurrió aquello.

-Decidí por mi cuenta salir de ahí, no me despidieron.

-Porqué quiso hacer algo como eso, claro teniendo en cuenta que el salario no es menor y además para la cantidad de años que llevaba debió tener un ascenso.